HOLOCAUSTO BAJO LA LUPA - JURGEN GRAF El Holocausto bajo la Lupa | Page 121
HOLOCAUSTO BAJO LA LUPA
En La historia de Eva 56 (Eva Scholoss) hijastra de Otto
Frank, cuenta de qué manera su madre escapó de la
cámara de gas como por milagro. El párrafo termina can
las siguientes palabras:
Esa noche los hornos del crematorio ardieron por horas y
horas y llamas de color naranja brotaron de las chimeneas
y subían al negro cielo nocturno 57
Pasajes de este tipo se encuentran en innumerables
«relatos de sobrevivientes»; las llamas saliendo de las
chimeneas de los crematorios forman parte del holocausto.
¡Ojalá llegue el día en que alguien les explique a los
sobrevivientes del holocausto que nunca salen llamas de
la chimenea de un crematorio! Una leyenda especialmente
repugnante, que aparece en muchos de estos relatos, es la
de la grasa humana que corre de los cadáveres cuando se
los quema y que se aprovecha como combustible
adicional. En Tratamiento especial 58 , Filip Müller escribe:
Junto con el ayudante Eckhard, el ingeniero asesino bajó a
una de las fosas para marcar sobre el piso una franja de 25
a 30 cm. de ancho, que corría por el medio en sentido
longitudinal. Aquí debía excavarse un canal que tuviese un
ligero declive hacia ambos lados, para que la grasa de los
cadáveres, cuando éstos ardían en la fosa, pudiese correr
hacia dos colectores. 59
¡Pregúntese a un experto en crematorios qué es lo que
opina sobre esto! Este cuento de horror indecible fue
56
(«Evas Geschichte », Editorial Wilhelm Heyne, 1991) Eva
Schloss,
57
p. 113 del libro-
58
Sonderbehandlung
59
p. 207 y sigtes.
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