History, Wonder Tales, Fairy Tales, Myths and Legends Principales Leyendas, Mitos y Cuentos Chilenos | Page 130
Presa del pánico, el esposo huyó del pueblo junto a sus hijos esa misma noche,
antes de que su mujer regresara, al amanecer. Nadie lo vio desaparecer y nunca
más se supo de él. En cuanto a Norma, cuando volvió a casa y no encontró a sus
hijos, enloqueció de pena, gritando de rabia y dolor. Sus gritos fueron tan
desgarradores y fuertes, que hasta los mismos demonios que vagan
constantemente por la tierra para aquejar a los seres humanos, se espantaron al
oírla. Y sucedió que después de los lamentos, la piel de Norma se secó y su
cuerpo se marchitó, y comenzó a llorar de una forma horrenda y escalofriante por
siempre jamás.
La gente que salía a altas horas de la noche
contaban que oían a una mujer llorar a lo
lejos. Unas pocas personas que en aquellos
tiempos
la
pudieron
ver,
luego
enloquecieron, gritando que habían visto
un cadáver caminar flotando por el aire,
hirviente de gusanos y envuelto en jirones
de ropa manchada de sangre negra.
También gritaban que el espectro de esa
mujer preguntaba con lastimera voz por
sus hijos, tragándose el alma de aquel que
le respondiera. Por eso, todos huían de ella
En aquellos tiempos fue cuando se la
bautizó como la Llorona, mujer de la
noche, tragadora de almas.
La gente comenzó a temerla, y cuando se
escuchaba su llanto se cerraban las puertas
y ventanas de todas las casas. Pero algo
bueno debe tener su espíritu, pues se dice que si alguien tiene pacto con el diablo
no puede sufrir daño por ella, porque huye, sin querer mezclarse con Satanás, ya
que de él vendría toda su desgracia, que se inició el día en que ella lo prefirió
ante la ausencia de su esposo.
Otra forma de hacerla huir es gritarle su nombre –Norma-, y entonces ella se
esfuma. También se dice que la Llorona busca raptar niños para absorberles el
alma y dejar sus cuerpos tirados cerca del río o en los cerros.
130