Historia del Mercado de Tortosa LLIBRE+MERCAT+DE+TORTOSA+FINAL | Page 198

Esto es lo que esperamos nosotros y con nosotros, Tortosa toda, de la independencia y justicia del Sr. Gobernador civil de la provincia. Si, como todos confiamos, así lo hace, habremos asistido a las postrimerías del Mercado. Véase lo que acontece el día 13 de Noviembre de 1889 LA VOZ DEL PROGRESO - 27 Octubre de 1889 HEMOS VENCIDO! Ya conocen nuestros lectores el acuerdo unánime de nuestra digna Corporación provincial en el asunto de la alzada que en contra de la recepción definitiva del Mercado de Abastos, decretada tan sin razón por la mayoría de nuestro Municipio ha recaído. No podía menos de suceder así puesto que la razón y el derecho estaban de nuestra parte, y decimos de nuestra parte, porque los firmantes del recurso de alzada que se interpuso en c contra de la grave y poco meditada resolución de nuestros ediles representaban la opinión unánime del país, que se levantó airada en contra de los que, sin inspirarse para nada en ella inconscientemente por que se resiste aplicarles otro calificativo, acordaron gravar a nuestro Erario, con cantidades que Tortosa nunca podía ni debía satisfacer, por ser altamente injustas. Dada la índole de este asunto, tan claro y tan palmario, puesto que la construcción del Mercado se adjudicó a la casa constructora en virtud de subasta pública y con un bien detallado pliego de condiciones, subasta que se intentó anular por otra casa constructora ayudada y defendida por cierta individualidad, cuyo nombre excusamos por ser demasiado conocido por todo el país. Tortosa no se explicó el por qué de las componendas, el porque de barrenar el contrato establecido de buena fe y que había servido de base a la construcción de aquel edificio y al ver en la célebre sesión la forma y el modo como se aprobaba la contrata, Tortosa que estaba allí, Tortosa que atónita escuchaba las razones en que se apoyaban los que querían modificarla, Tortosa que, con el rubor en el rostro y el dolor en el alma se hacía cargo de las innumerables votaciones que por cualquier incidente se promovían, Tortosa que oía como el pedir nuestro digno representante el Sr. Llatge, que con el objeto de ilustrar a la Corporación se llamase a un empleado para que diese explicaciones concretas sobre un hecho de su informe pericial casi previsto en el Reglamento interior aprobado por la Corporación se le negaba Tortosa entera se levantó unánime y representada muy fielmente por los dignísimos Sres., que firmaron el recurso se alzó de un acuerdo injusto y vejatorio para los intereses de nuestra población y sobre el cual, como ya saben nuestros lectores, ha recaído la resolución unánime de nuestra digna Comisión provincial. Hemos vencido pues, y hemos salvado los intereses de nuestra querida ciudad, pero no imponiéndonos con la fuerza ni con el soborno si con la razón y con la justicia que en este, como en todos los asuntos de intereses de nuestra ciudad, nos anima y nos animará siempre. Réstanos solo felicitar con la mayor efusión a nuestro dignísimo Diputado D. Juan Ravanals, individuo de la Comisión Provincial, ponente de la misma para este asunto, por lo bien que al redactar la memoria interpretó las aspiraciones de nuestros conciudadanos, llevado de un verdadero valor cívico las expuso en su informe. - 198 -