Conclusión
Con la técnica hidropónica o cultivo sin suelo, se puede diseñar un proyecto de
producción continua; que permite cuantificar el número de plantas de acuerdo al
espacio disponible, la nutrición, la temperatura, el tiempo de siembra- cosecha, de
acuerdo a la fecha requerida; que puede ser a todo lo largo del año, de la misma
planta o de plantas diferentes y también elaborar la programación requerida que
irá de acuerdo a la fecha de entrega y a la utilidad esperada.
Aplicando esta técnica de cultivo podemos obtener vegetales totalmente libres de
contaminación, en volúmenes realmente importantes a bajo costo y sin perjuicio
para el planeta ni para los que aquí habitamos.