HARRY POTER Y LA PIEDRA FILOSOFAL Harry_Potter_y_la_Piedra_Filosofal_01 | Page 205

aunque mantenía sujeto a Harry aplastándolo con las rodillas, le soltó el cuello y contempló, aterrorizado, sus manos. Harry vio que estaban quemadas, en carne viva, con ampollas rojas y brillantes. —¡Entonces mátalo, idiota, y termina de una vez! —exclamó Voldemort. Quirrell levantó la mano para lanzar un maleficio mortal, pero Harry, instintivamente, se incorporó y se aferró a la cara de Quirrell. —¡AAAAAAH! Quirrell se apartó, con el rostro también quemado, y entonces Harry se dio cuenta: Quirrell no podía tocar su piel sin sufrir un dolor terrible. Su única oportunidad era sujetar a Quirrell, que sintiera tanto dolor como para impedir que hiciera el maleficio... Harry se puso de pie de un salto, cogió a Quirrell de un brazo y lo apretó con fuerza. Quirrell gritó y trató de empujar a Harry. El dolor de cabeza de éste aumentaba y el muchacho no podía ver, solamente podía oír los terribles ge- midos de Quirrell y los aullidos de Voldemort: ¡MÁTALO! ¡MÁ TALO!, y otras voces, tal vez sólo en su cabeza, gritando: «¡Harry! ¡Harry!». Sintió que el brazo de Quirrell se iba soltando, supo que estaba perdido, sintió que todo se oscurecía y que caía... caía... caía... Algo dorado brillaba justo encima de él. ¡La snitch! Trató de atraparla, pero sus brazos eran muy pesados. Pestañeé. No era la snitch. Eran un par de gafas. Qué raro. Pestañeó otra vez. El rostro sonriente de Albus Dumbledore se agitaba ante él. —Buenas tardes, Harry —dijo Dumbledore. Harry lo miró asombrado. Entonces recordó. —¡Señor! ¡La Piedra! ¡Era Quirrell! ¡Él tiene la Piedra! Señor, rápido... —Cálmate, qúerido muchacho, Dumbledore—. Quirrell no tiene la Piedra. estás un poco atrasado —dijo —¿Entonces quién la tiene? Señor, yo... —Harry, por favor, cálmate, o la señora Pomfrey me echará de aquí. Harry tragó y miró alrededor. Se dio cuenta de que debía de estar en la enfermería. Estaba acostado en una cama, con sábanas blancas de hilo, y cerca había una mesa, con una enorme cantidad de paquetes, que parecían la 205