habitissimo | página 89
El precio medio de añadir cemento pulido decorativo a
un hogar va entre los 40 y los 70 euros por metro cuadrado,
en función de la tipología elegida, y para su mantenimiento
solo requiere agua y un pH neutro: “Frente a otros revesti-
mientos, no necesita retirar el soporte existente, se aplica
sobre cualquier superficie –azulejo, cerámica, piedra, cris-
tal…–, lo que supone, en retirada de escombros y mano de
obra, un gran ahorro, además de disminuir el polvo en el
trabajo; es un material de gama alta o lujo con grandes ven-
tajas, perfecto para los hogares del mañana”. Con un espe-
sor de apenas dos o tres milímetros añade a los espacios
una estética industrial, con gran versatilidad para los estilos
decorativos, similar a la apariencia del hormigón o los en-
cofrados, y con gran durabilidad. Y pese a su apariencia
fría, es un regulador térmico excelente tanto para invierno
Puesta a punto
como para verano, evita las humedades y se presenta como
un gran aislante acústico.
Esta imagen ruda pero elegante también ha llevado a que
el cemento se instale en los objetos decorativos, más allá del
mencionado uso en superficies. Desde el pasado año, Zara
Home ha incluido varios jarrones y objetos para baño elabora-
dos con cemento teñido que se han convertido en superven-
tas. Pese a que, en su guía de uso, no recomienda utilizar agua
en su interior, su aspecto tosco, cercano a la tendencia de
objeto único, ha completado ya muchas estanterías de casa.
También la firma Kave Home lanzó este año su colección Nille
de jarrones producidos en cemento, que simulan tuberías con
un peso de dos kilos y que acerca la popular estética brutalis-
ta de la arquitectura a los hogares. Los prejuicios ya entran en
la decoración contemporánea.