Habitissimo Invierno 2019 | Page 33

habitissimo | página 31 Seamos claros. Las chimenas tradicionales no atraviesan por su mejor momento. Numerosos países europeos están tomando partido para que las viviendas que cuentan con este sistema de calor adopten otras medidas para conseguir el confort y el bienestar asociado a su poder calorífico. Los problemas que generan en cuestiones de contaminación am- biental son su espada de Damocles. Como dato curioso basta señalar que, desde el año 2015, la ciudad de París ha prohibi- do la quema de madera por este sistema. En nuestro país la normativa tan solo afecta a la combus- tión de este tipo de materiales en calderas o edificios, tanto particulares como públicos, en los que la calefacción utiliza este combustible. Así que, tranquilos, las viviendas tradicio- nales no se ven afectadas. Si estás pensado en instalar en tu casa una chimenea tradicional nada te lo impide. Es de sabios reconocer sin duda alguna la agradable sensación de bien- estar que se genera cuando permaneces apostado en el sofá de casa y observas cómo el crepitar de las llamas quema las mejores horas muertas de tu ocio. Las alternativas que han surgido para subsanar el pro- blema contaminante de este calor barato no se han hecho esperar. En este artículo trataremos de aclararte todas las po- Puesta a punto sibilidades que hay en el mercado para que tú decidas qué sistema de chimenea te interesa más. ¿Qué pesará más en tu decisión, la ecología, el gasto, la estética o el bienestar a cualquier precio? Dile adiós a la madera Si todavía eres de los que se quedan fascinados contemplan- do cómo el crepitar del fuego y su combustión originan un calor constante y romántico, la decisión está clara. Este tipo de chimenea de toda la vida, en la que la leña se consume en el hogar, es tu modelo a seguir. Ni que decir tiene que es la opción que mejor cantidad de calor aporta a la habitación en la que se encuentra ubicada, pero tiene ciertas desventajas. Genera muchos residuos, necesita una salida de humos a cu- bierta, por lo que su instalación en bloques de vecinos es in- viable, y el carbón y la madera, que cada vez se comercializan menos, son combustibles imprescindibles para mantener viva la llama. Además no puedes descartar que tarde o temprano la normativa de tu ciudad pueda alterar tus planes y te obligue a adaptar tu sistema de calor.