Un proyecto que incentiva a los chicos a leer llega
a la escuela América del Sur
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En la escuela América del Sur se llevó a cabo un proyecto que consistía en que cada alumno y maestro trajera el libro que quería y lo leyera durante quince minutos un día a la semana.
“Escuela leyendo” es un proyecto que se organizó basándose en la idea de mindfullness, una técnica que afirma que, en un momento determinado, en completo silencio y totalmente concentrados en algo puntual -en este caso los libros- podemos pensar y reflexionar mejor y aprovechar a pleno el cerebro.
Esta actividad se hizo una vez a la semana durante dos meses con una duración de quince minutos cada vez, determinando con el sonido de un timbre el inicio y el fin. Los maestros y alumnos participaban sin excepción, no importaba en qué materia se encontraban. Cada uno podía elegir un libro, sin restricciones del estilo que fuera, para llevarlo y leerlo en cada oportunidad ya que podías cambiarlo todas las semanas.
Al principio, no entendíamos cuál era el propósito, sin embargo cumplíamos con lo que teníamos que hacer. Cuando nos explicaron, nos pareció interesante y, cuando volvimos a leer un libro fuera de ese espacio, comprobamos que la teoría era cierta y notamos la diferencia.
Las maestras de primero y cuarto grado nos contaron su experiencia:
Dánae (maestra de primer grado): “Me sorprendió que se portaran tan bien y que pudieran cumplir con la propuesta. Algunos chicos no sabían leer, entonces yo les leí el libro que ellos habían traído.”
Rocío (maestra de cuarto grado): “Yo creí que les iba a costar más, pero se pudieron adaptar fácilmente y les gustó mucho, y terminado el tiempo no querían parar de leer”.
La escuela leyendo se está expandiendo por otras instituciones. Todos los alumnos y maestros deberían tener la oportunidad de probarlo y dar sus opiniones ya que esta propuesta no es solo un experimento, sino que es una forma de saber de lo que somos capaces y aprovecharlo al máximo.
La lectura enriquece el pensamiento
¡Disfrutémosla!
su experiencia:
Dánae (maestra de primer grado): “Me sorprendió que se portaran tan bien y que pudieran cumplir con la propuesta. Algunos chicos no sabían leer, entonces yo les leía el libro que ellos habían traído.”
Rocío (maestra de cuarto grado): “Yo creí que les iba a costar más, pero se pudieron adaptar fácilmente, les gustó mucho y, terminado el tiempo, no querían parar de leer”.
"Escuela leyendo" se está expandiendo por otras instituciones. Todos los alumnos y maestros deberían tener la oportunidad de probarlo y dar sus opiniones ya que esta propuesta no es solo un experimento, sino que es una forma de saber de lo que somos capaces y aprovecharlo al máximo.
La lectura enriquece el pensamiento
¡Disfrutémosla!
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