declive de la población de gorilas
desmesurada e ilegal de árboles
es generado como consecuencia
y bosques vírgenes) y el aumento
de las epidemias masivas de la
de la agricultura en las selvas y
fiebre
hemorrágica
bosques
Ébola,
con
un
del
gran
virus
impacto
de
África
Central
y
Oriental. Esto deja a los gorilas
dentro de parques y de áreas
sin
protegidas. Para el 2004, cientos
follaje de su hábitat natural, lo
de gorilas del Parque Nacional de
que
Odzala murieron a causa del
fáciles para los cazadores.
virus Ébola. Según la Revista
Sciencie, en el 2006, en países
como la República Democrática
del Congo, el virus del Ébola ha
matado el 25% de los gorilas de
la llanura africana y al 95% de los
ejemplares
del
santuario
de
Lossi, una superficie de 320 km2
entre
Gabón
y
República
Democrática del Congo. Hasta
ahora, no hay cura contra este
virus, aunque se ha demostrado
que
al
vacunas
menos
cinco
de
experimentales
las
para
humanos protegerían también a
los simios. Pero al parecer nadie
se muestra muy interesado en
costear
un
vacunación
enfermedad
programa
contra
que
hasta
de
una
ahora
sólo ataca a unos miles de
refugiados y a los supervivientes
de una especie en extinción. Los
gorilas
también
han
sido
víctimas de la pérdida de su
hábitat
por
mineras,
deforestación
las
explotaciones
la
enorme
(la
tala
la
protección
los
del
convierte
denso
en
presas
Similarmente, la operación de las
milicias armadas y del ejército
congoleño
constituyen
una
amenaza para la supervivencia
de la especie, siendo los gorilas
las víctimas más inocentes de las
luchas armadas de la región
africana. Durante la década de
los 90, los refugiados mataron a
muchos gorilas en búsqueda de
su
propia
supervivencia
y
saquearon el parque nacional
refugio de los gorilas en las
montañas,
destruyendo
espacios
estos
naturales.
situación
es
Esta
bastante
desalentadora para el futuro de
los gorilas, que ha visto diezmar
su población en al menos 60 %.
Por
ello,
los
gorilas
podrían
llegar a extinguirse dentro de
tan sólo quince años, así lo
advirtieron en el Programa de las
Naciones Unidas para el Medio
Ambiente (PNUMA) y la policía
Internacional
(INTERPOL).
Ante
escenario, es el momento que la
comunidad
de
Ozdala,
las