Venus
Sobriedad al más puro estilo de Apple
De diseño pulcro y hasta minimalista, Venus fue el último proyecto que se echó a andar a cargo
de Steve Jobs, fundador de Apple. El cual, tristemente logró culminarse después de que este
falleciera por cáncer de páncreas.
Jobs quería una embarcación que tuviera lo último en seguridad y confort, sin perder la navegación,
por lo que, junto con el diseñador Philippe Starck y la compañía Feadship, se dio vida a uno
de los yates más tecnológicos del mundo, valuado en más de 100 millones de dólares.
Este ‘gadget’ marino cuenta con únicamente seis cabinas y suites para un máximo de 12 pasajeros,
que son atendidos por un grupo de 22 tripulantes, cuenta con 78 metros de eslora y va a una
velocidad de 22 nudos. También consta de siete iMac de 27 pulgadas que lo gobiernan desde un
puente de mando cuadrado y diáfano, muy al estilo de Apple. De hecho, toda la estructura de
Venus, es un homenaje al diseño simple que caracteriza a la marca.
De lo poco que se sabe sobre el interior de este yate, es que la suite principal, cuenta con un
jacuzzi y todos los camarotes tienen ventanas con paneles de tres metros de alto.