Gestión del Riesgo en Colombia Gestion Riesgo Banco Mundial Colombia | Page 286

nacional de reserva 30 y la evacuación en caso de emergencia 31 . El MPS también apoya programas de desarrollo de la salud, con la atención a per- sonas en alto riesgo, pertenecientes a poblacio- nes con más de 50 mil habitantes, y a personas vulnerables, en centros poblados con menos de 50 mil habitantes; y dispone del Plan Nacional de Salud Rural. Además contribuye al funciona- miento de la red hospitalaria, a la actualización e implementación de los Planes Hospitalarios para Desastres y a la revisión y ajuste de las Guías de Atención Médica de Urgencias. El Plan Nacional de Contingencia con- tra Derrames de Hidrocarburos es un caso exitoso de organización específica para en- frentar situaciones de emergencia, que aun- que fue constituido por Decreto Nacional podría ser emulado de manera voluntaria por otros sectores. El “Plan nacional de con- tingencia contra derrames de hidrocarburos, derivados y sustancias nocivas en aguas ma- rinas, fluviales y lacustres” fue ordenado por el Decreto 321 de 1995 como una herramien- ta de coordinación interinstitucional entre las instancias de prevención y atención de desas- tres del Estado colombiano, de las autoridades ambientales y el área industrial, buscando que este tipo de emergencias se atiendan bajo crite- rios unificados. El objetivo es aunar esfuerzos públicos y privados para tener disponibilidad de los equipos, el conocimiento y la experticia para enfrentar contingencias a nivel nacional, a cambio de que cada empresa tenga que enfren- tar la situación de manera independiente, aun- que la responsabilidad de la coordinación del control del derrame y sus consecuencias siguen en manos de la instalación, operación, dueño de la sustancia o actividad que lo originó. Si bien el Plan fue estructurado para enfrentar el riesgo de accidentes operativos o terrorismo, puede ser de gran utilidad en caso de un desas- tre asociado a fenómenos naturales, y debería ser adaptado de manera voluntaria u obligato- ria en otros sectores como en la minería o en la industria de materiales peligrosos, entre otros. En general, las fuentes de financiación para la respuesta a emergencias funcionan por demanda, no tienen procedimientos estándar para evaluar los daños y no están articuladas, lo que ocasiona desequilibrios en la asigna- ción de recursos por deficiencias en la gestión de los entes territoriales. Las diferentes capa- cidades institucionales entre municipios hacen que la calidad y la oportunidad de las solicitudes de recursos para atención y reconstrucción des- pués de un evento catastrófico difieran y no sean coherentes con los impactos reales en campo. Como resultado, los entes locales de menor ca- pacidad tienden a recibir montos presupuestales más pequeños por las debilidades en su gestión. 30 Suministro de medicamentos, insumos médico-quirúrgicos, antídotos, elementos de saneamiento básico, etc. 31 Movilización de personal, elementos, medicamentos e insumos de emer- gencias, entre otros. Manejo del riesgo de desastres en la gestión sectorial 261