Gestión del Riesgo en Colombia Gestion Riesgo Banco Mundial Colombia | Page 277

El conocimiento y los sistemas de in- formación sectorial sobre registros históri- cos de pérdidas y afectaciones por desastres, inventarios/catastros de su infraestructura y vulnerabilidad, y el análisis del riesgo, son fun- damentales para determinar la magnitud real del problema, identificar las necesidades, y construir planes de gestión del riesgo específi- cos basados en los estudios de costo-beneficio. Algunos ámbitos tienen avances en la materia, pero en general hay grandes deficiencias so- bre el entendimiento y el dimensionamiento del riesgo a nivel sectorial. El PND 2010-2014 identifica la importancia de construir sistemas de información sobre la población y el patri- monio expuesto y su vulnerabilidad, así como la urgencia de crear una cultura y un apropiado acceso al conocimiento para la toma de deci- siones que minimicen el riesgo y fortalezcan la efectividad de las alertas tempranas. La actual UNGRD, según el Decreto 919 de 1989, tiene la responsabilidad de fomentar un sistema que articule los datos de los sectores y de los acto- res del SNPAD; por lo tanto, es indispensable que la iniciativa se enmarque en la Infraestruc- tura Colombiana de Datos Espaciales (ICDE), garantizando una mayor interoperabilidad, a través de la implementación de estándares in- ternacionales, y fortaleciendo la estimación del riesgo de desastres y su gestión. 4.2.5. Reducción del riesgo en los sectores El sector energético es el mejor ejemplo de cómo la combinación de instrumentos nor- mativos, económicos y de planeación pueden ser mecanismos efectivos para reducir el riesgo. Posterior al racionamiento ocasionado por el fe- nómeno de El Niño 1991-1992, se implementó una estrategia para diminuir la vulnerabilidad, 252 la cual incluyó la reestructuración del sector y el fortalecimiento de la cultura de la planeación a mediano y largo plazo. Sobre la experiencia de la deficiente operación del sistema y de la escasez de agua generada por El Niño (embalses con niveles más bajos del 40% de su capacidad de almacenamiento), se llevaron a cabo procesos de modernización y de reforma financiera, co- mercial y administrativa, para darle viabilidad a las empresas, elevando los procedimientos de control y, sobre todo, abriendo espacio a la competencia y al aporte de nuevos operadores. El plan de expansión eléctrica se encaminó a superar la alta dependencia del recurso hí- drico, mediante la construcción y entrada en funcionamiento de centrales térmicas, aumen- tando así la capacidad instalada de generación de 8.356 MW a 11.587 MW. Actualmente el Plan de expansión de referencia, generación y transmisión 2010-2024 es la herramienta por excelencia para garantizar la continuidad y la estabilidad del servicio. El instrumento del “cargo por confia- bilidad” es el que permite asegurar el sumi- nistro de energía en épocas de sequía. En un sistema predominantemente hidroeléctrico como el colombiano, el reto de garantizar la continuidad del servicio ante fenómenos cli- matológicos puede producir desajustes impor- tantes, que dificultan el logro del equilibrio real entre demanda y oferta (Villareal & Cór- doba, 2007). El cargo por confiabilidad, que opera desde diciembre del 2006, ha probado tener la bondad de generar incentivos para que el sector privado invierta en infraestructura de respaldo (principalmente térmica), y a su vez que la libre competencia garantice el mínimo costo para los usuarios. Esto se logra a partir de las Obligaciones de Energía Firme (OEF), que corresponden a un compromiso de los ge- neradores, respaldado por una infraestructura capaz de producir energía durante condiciones Análisis de la gestión del riesgo de desastres en Colombia: un aporte para la construcción de políticas públicas