Gestión del Riesgo en Colombia Gestion Riesgo Banco Mundial Colombia | Page 228

CAR. Dichos Planes materializan las visiones estratégicas de los PGAR y son las herramientas que definen y orientan las inversiones ambienta- les que desarrollará la CAR en su jurisdicción. Los POMCA son determinantes para la preparación de los POT de los municipios, y deberían ofrecer pautas para guiar los proce- sos de ordenamiento territorial, al ser jerar- quía normativa de otras disposiciones legales con que cuentan las entidades; sin embargo, en muchas ocasiones los POMCA toman la infor- mación puntual de amenazas de los POT mu- nicipales y no brindan análisis de las cuencas de una manera integral. En la mayoría de los POMCA sólo se enuncian los tipos de fenóme- nos presentes en las cuencas, mas no se expone un análisis espacial de la amenaza y menos del riesgo. Muchos de ellos en lugar de contribuir a los POT, lo que hacen es recoger información de estos mismos, al extremo incluso que algunos mencionan que debido a que los POT municipa- les no cuentan con información sobre amenazas, por tal motivo tampoco la incluyen en los planes de cuencas. El POMCA del 2007 desarrollado por las CAR relacionadas con la ecorregión del Canal del Dique incluye los mismos conceptos sobre amenazas que existen en los POT de la re- gión no constituyen realmente una mirada inte- gral de las amenazas por inundación que son, en primer orden, las que ameritan mayor atención en las cuencas. Lo mismo ocurre en los POMCA de la cuenca del río Bogotá, que por lo demás, salvo el Distrito Capital, ningún POT municipal ha incorporado debidamente la problemática de inundaciones. La frágil inclusión de los elemen- tos para la gestión del riesgo en los instrumentos de planificación regional, los cuales deberían ser orientadores y determinantes para la construc- ción de los POT, debilita la integración entre las dos herramientas, y a su vez, de éstas con los PD municipales y departamentales. No obstante, se resaltan casos como los POMCA de la cuenca del río Sinú y de La Mojana, en donde el análisis de amenaza se desarrolló adecuadamente, pero la información no fue contemplada en los POT municipales, ni en el PGAR. A la debilidad en la incorporación del enfoque de gestión del riesgo en los instru- mentos de planificación se suma la ausencia de una articulación real de los instrumen- tos ambientales. Los instrumentos de plani- ficación ambiental han incluido sólo algunos elementos de la gestión del riesgo, debido a la información fragmentada y altamente depen- diente del interés de actores particulares. Sólo aparece una mención general de las amenazas por fenómenos naturales en los componentes de marco general y en el diagnóstico de los PGAR, los Planes de Acción y los POMCA, así como en las visiones regionales y en la síntesis ambiental de los instrumentos. Esta manera particular de abordar la temática es el resulta- do de la ausencia de una perspectiva integral que reúna y articule otros enfoques comple- mentarios, privilegiando una visión sectorial de la gestión ambiental sobre una más integral y holística, asociada con el control y manejo de los riesgos por fenómenos naturales. Aun- que los PGAR se encuentran más integrados a los Planes de Acción, ya que estos últimos ponen en marcha las estrategias y líneas de ac- ción de los primeros, no existe una clara vin- culación con los POMCA. En otras palabras, los PGAR y los Planes de Acción no se articu- lan con los POMCA. Aunque la naturaleza de los POMCA muchas veces excede las jurisdicciones de las CAR, los PGAR y los Planes de Acción se traducen en herramientas complementarias para asignar los recursos y mejorar el orde- namiento y manejo de las cuencas. La ausen- cia de articulación entre instrumentos impide que las estrategias desarrolladas por estas tres herramientas sumen esfuerzos y surtan mayor impacto en las regiones. Rol de la administración del territorio en la gestión del riesgo de desastres 203