Generando Arte. La Revista. Nº 3. Octubre 2015 | Seite 7
El tramo más alto de la escalera
Generando Arte- En España se valora especialmente la
labor que las artistas norteamericanas realizaron en los años
sesenta y setenta porque dieron un aire nuevo al mundo del
arte y que inició esa inquietud en las artistas de otros países.
¿Cómo fue posible esa irrupción?
Martha Rosler- Desde mediados de los 50 y en adelante,
aunque no de forma completamente organizada, se estaba
gestando un movimiento feminista bajo la superficie de la
sociedad. El distanciamiento y la indignación de las mujeres
fue provocado por el hecho de que las mujeres estaban
siendo reprimidas de forma evidente: se les decía que tenían
que casarse, quedarse en casa y estar monas… Ya durante
la Segunda Guerra Mundial, las mujeres americanas habían
realizado el mismo tipo de trabajo que los hombres, porque
en realidad se las empujaba a hacerlos ya que los hombres
estaban en el frente. Incluso antes de la guerra, muchas
mujeres habían salido a trabajar fuera de sus casas y llevaban
adelante esas tareas razonablemente bien.
El movimiento feminista surgió de nuevo a finales de los
sesenta, las mujeres artistas, en apenas un año, decidieron
que tenían que organizarse como tales, y no simplemente
como mujeres. Esto sucedió simultáneamente en todo el
país. Un estímulo importante fue la creación del Programa
de Arte Feminista, fundado en la Universidad de California
en 1970 por Judy Chicago, a quien se unió Miriam Schapiro,
ambas llevaron este revolucionario programa a Los Ángeles,
en el recién creado Instituto de Arte de California.
7