COSTUMBRES
Los deportes de invierno están muy arraigados en la población
Al igual que el resto de países nórdicos los noruegos gozan de un alto
nivel de vida y están muy apegados a sus costumbres y tradiciones. A
diferencia de sociedades latinas, los espacios públicos en Noruega son
más tranquilos y silenciosos. La gente tiende a hablar en voz más baja
tanto en la calle, como en un restaurante, un museo o en el autobús. De
ahí que en ocasiones los noruegos sean percibidos como fríos y distantes,
mientras que en realidad en el trato personal o un ambiente privado
pueden ser tan acogedores y abiertos como el que más.
La igualdad de sexos es una de las principales características de la
sociedad noruega y se refleja tanto en el aspecto laboral, como en la vida
pública y privada. Las familias noruegas dividen el trabajo doméstico
entre hombres y mujeres de una forma equitativa y normalmente evitan
los estereotipos de trabajos domésticos típicos de mujeres y hombres. La
práctica de los deportes de invierno en familia es muy habitual en todo el
país, por lo que si conoce gente allí, es fácil que nos inviten a esquiar o a
pasar un fin de semana en la nieve. No hay que olvidar que la temporada
en Noruega dura casi todo el año, con lo que es posible practicar el esquí
veraniego en montañas y glaciares.
Tanto las piscinas como las saunas son otras de las sanas costumbres
muy habituales en Noruega. Todas las poblaciones, por pequeñas que
sean, tienen su piscina pública que, además de su función como
instalación deportiva, es lugar de encuentro y relaciones sociales. Las
saunas, por su parte, están presentes en la mayoría de hoteles, cabañas,
campings y alojamientos del país.