3
far away mag
los baños
UN PLACER al final del día
después de andar durante horas no hay nada
mejor que acercarse a uno de los baños termales
que hay por toda la ciudad. No son baratos, pero
te quedas como nuevo.
Los hay monumentales, como los Széchenyi, que es
enorme, con cinco piscinas y doce baños termales,
o los Géllert, de estilo Art Nouveau y situados en el
conocido hotel del mismo nombre. Además, tiene
piscina de olas por si te cansas de estar flotando en
agua caliente. También hacen masajes u otros servicios de belleza.
Por su pasado histórico, algunos de los baños siguen
siendo de estilo turco, como el de Rudas o el Király,
que mantienen la arquitectura de hace 500 años,
o muy modernos como el gigantesco Dagály, perfecto para ir con niños.
11