Especies 2-17 jul-sep 2-17 | Page 11

De la vida en el agua a la vida en el aire dejando atrás la “cáscara” de la antigua vida acuática. Los adultos son bastante torpes para volar en sus primeros días, ya que su cutícula, masa muscular y energía son todavía incipientes. Sin embargo, poco a poco ganan destreza en el vuelo y la cacería, hasta convertirse en excelentes depredadores y voladores magistrales. Las libélulas tienen un ciclo de vida com- plejo, debido a que pasan por distintos ambientes durante su desarrollo. Los hue- vos y larvas viven en el agua, mientras que los adultos salen al aire. Esto implica que un mismo genoma debe contener toda la información para que el animal se adapte adecuadamente. Algunos autores creen que para lograr un genoma así, quizás hace millones de años hubo una fusión de genomas de animales con estilos de vida totalmente diferentes lo cual dio lugar a una especie de “Frankenstein” con la capacidad de adaptarse a este tipo de transiciones ambientales. El tiempo como huevo varía según la especie. Tanto las larvas como los adul- tos son depredadores voraces de presas de un tamaño manipulable, como artró- podos, anfi bios e incluso peces. Su sis- tema sensorial está adaptado para una caza rápida e infalible, con ojos muy grandes que ocupan casi la totalidad de su cabeza, y mandíbulas que se desplie- gan a manera de pinzas muy largas para atrapar a sus presas, destrozarlas e in- gerirlas. Las larvas de libélulas no son depredadores activos, es decir, raramen- te buscan su alimento, más bien, usan sus antenas para detectar el paso de una presa sin necesidad de moverse. Sus etapas como larva y como adul- to varían desde un mes hasta poco más de un año, dependiendo de la especie. La larva pasa por varias mudas hasta finalmente alcanzar el estado adulto. Previo a esto, la larva sale del agua, se agarra a una percha fi rmemente y se transforma en un individuo con alas, Durante su ciclo de vida las libélulas dependen de cuerpos de agua dulce como lagos o ríos. Las larvas viven bajo el agua y luego buscan un lugar adecuado para pasar a la siguiente etapa. En esta imagen, el adulto se sujeta de su antigua piel mientras sus alas están completamente listas para volar 9