MANAGEMENT
MAGAZINE
ACCIÓN MUJER
Mujeres líderes transforman empresas,
comunidades y sociedades.
En los últimos años la incorporación de la mujer en
roles directivos de empresas y gobiernos facilitó una
evolución en las tareas tradicionalmente asignadas
por la sociedad. Este cambio ha sido posible debido
al signifiivo aumento de las facilidades educacionales,
la incorporación de tecnologías neutras respecto del
género y la exigencia de las mismas sociedades
respecto a mayores niveles de igualdad.
La presencia de la mujer profesional en puestos
directivos estratégicos, asumiendo funciones
relevantes en ámbitos empresariales locales y
multinacionales, ha multiplicado historias de éxito
inspiradoras. Empresas destacadas de la región han
incorporado a sus decisiones de política empresarial
medidas que fortalecen las oportunidades,
participación e injerencia en sus procesos operativos y
directivos. Incluso, los programas de Responsabilidad
Social Empresarial incluyen programas que fomentan
estrategias destinadas a lograr mayores niveles de
igualdad de género.
En paralelo, el involucrar activamente a los hombres en
tareas que mayoritariamente desempeñaban mujeres,
es otro paso significativo. Cambios organizacionales
orientados a erradicar la desigualdad por razones de
género, facilitando el posicionamiento en las empresas
del mejor talento posible para cada puesto de trabajo.
“Las empresas que apuestan a la participación activa
de las mujeres son percibidas como socialmente
responsables, logran una mayor eficiencia y un mayor
rendimiento del personal, más compromiso de los
empleados, y la mejora de la contratación y de su
imagen pública. De hecho, para muchos las empresas
se vuelven más rentables”, expresa Susan McDade,
directora regional adjunta del PNUD para América Latina
y el Caribe.
En cuanto al ámbito educativo, a pesar que las mujeres
en muchas de las ocasiones alcanzan mejores niveles
educativos que los hombres, aún cuesta que ocupen
puestos de toma de decisión y liderazgo. Hoy en día
en ESI, el 47% de los estudiantes activos son mujeres,
3% más que el año pasado; siendo esto algo grato e
inspirador. Pero reducir la brecha de la educación no es
suficiente, se debe seguir mirando la enseñanza con el
área de negocios.
Los programas ejecutivos que ESI imparte buscan
potenciar a las mujeres preparándolas para asumir
posiciones de responsabilidad en las empresas y ocupar
así puestos gerenciales, en comités ejecutivos, juntas
directivas o emprender un negocio para transformar
no solo las empresas, sino también las comunidades y
sociedades en donde se desenvuelven.
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