Pinocho
Érase una vez, en un pequeño pueblo, un hombre honesto
llamado Gepetto. Era un carpintero. Su sueño era tener un hijo. Un día,
Gepetto cortó un tronco de árbol y decidió hacer un pelele llamado
Pinocchio. Durante la noche, un hada apareció y atendió su deseo. Al día
siguiente, Pinocchio era un pelele vivo pero para ser un niño hasta el final
de su vida, Pinocchio debía ser agradable e ir a la escuela. Para
supervisar el chico, ella envió su grillo llamado "Jimminy Grillo".
Un día, Pinocchio andaba sobre el camino de la escuela cuando
se encontró con dos personajes que se llamaban "Grand Coquin" y
"Gedeón". Estos personajes tenían una pasión por el dinero. Ellos lo convencieron que dejara la
escuela para el teatro. Pinocchio aceptó. Luego, se unió a la compañía del Stromboli, un cruel titiritero.
Stromboli encerró el pelele en una jaula. Pinocchio estaba triste y pensaba en su padre. De repente, el
hada apareció y comenzó a hablar con la marioneta. Pero Pinocchio mentía y su nariz se estiraba.
Finalmente, dijó la verdad y prometió que dejaria de mentir y ell hada le ayudó a escapar.
Tres días después, otra vez sobre el camino de la escuela, Pinocchio divisó a "Grand Coquin" y
"Gedeon". Le pidieron que acompañara sus compañeros de clase a la "Isla de los placeres", dónde no
había escuela ni adultos. No escuchó los consejos del hada y de Jimminy, Pinicchio aceptó la
propuesta. Como los niños hacían tonterías, se transformaron poco a poco en asnos. Jimminy intentó
convercerle de que se fueran porque su padre se preocuparía, pero no le escuchó. Luego, en efecto,
Gepetto comenzó a preocuparse, entonces, el hombre fue con un barco a buscar a su hijo. Durante su
trayecto en el mar, se hizo engullir por Monstruo la ballena.
Por su parte, Pinocchio comenzó a tomar conciencia de lo que hacia, entonces, el pelele decidió
huir. Cuando volvió a su casa, Gepetto no estaba aqui. Entonces, fue en su busca recorriendo el mismo
camino. Pinocchio se hizo engullir también. Luego, cuando se reencontraron, se abrazaron, felices de
verse. Ellos entraron en acción e imaginaron un plan para salir de esta pesadilla. Encendieron un fuego,
luego la ballena los escupió. Estaban libres.
En consecuencia de esta acción héroica, para felecitar a Pinocchio, el hada lo transformó en niño
verdadero y aqui se acaba este cuento, como me lo contaron te lo cuento.
MORALEJA:
La mentira es el peor de los delitos y le hace a uno la
vida difícil. No debemos mentir porque esto nos lleva a
hacer tonterías.
Estelle B.