NUEVO CEO DE INTEL EXPLORA UN GRAN CAMBIO EN EL NEGOCIO DE FABRICACIÓN DE CHIPS
El nuevo CEO de Intel está explorando un gran cambio en su negocio de fabricación por contrato para ganar clientes importantes, dijeron a Reuters dos personas familiarizadas con el asunto, en un cambio potencialmente costoso de los planes de su predecesor.
Si se implementa, la nueva estrategia para lo que Intel llama su negocio de“ fundición” implicaría dejar de comercializar cierta tecnología de fabricación de chips, que la compañía ha desarrollado durante mucho tiempo, a clientes externos, dijeron las personas.
Desde que asumió el cargo en marzo, el presidente ejecutivo Lip-Bu Tan se ha movido rápido para reducir costos y encontrar un nuevo camino para revivir al fabricante de chips estadounidense. En junio, comenzó a expresar que un proceso de fabricación por el que el anterior director ejecutivo, Pat Gelsinger, apostó fuertemente, conocido como 18A, estaba perdiendo su atractivo para nuevos clientes, dijeron las fuentes, que hablaron bajo condición de anonimato.
Persuadir a los clientes externos para que utilicen las fábricas de Intel sigue siendo clave para su futuro. A medida que su proceso de fabricación del 18A se enfrentaba a retrasos, la tecnología N2 de su rival TSMC ha estado en camino para la producción.
La respuesta preliminar de Tan a este desafío: concentrar más recursos en 14A, un proceso de fabricación de chips de próxima generación en el que Intel espera tener ventajas sobre el taiwanés TSMC, dijeron las dos fuentes. La medida es parte de una jugada para grandes clientes como Apple y Nvidia, que actualmente pagan a TSMC para fabricar sus chips.
El año pasado fue el primer año no rentable de Intel desde 1986. Registró una pérdida neta atribuible a la empresa de 18,800 millones de dólares para 2024.
Las deliberaciones del presidente ejecutivo de Intel muestran los enormes riesgos-y costos- que se están considerando para que el histórico fabricante de chips de Estados Unidos vuelva a tener una base sólida. Al igual que Gelsinger, Tan heredó una empresa que había perdido su ventaja manufacturera y se había quedado atrás en las olas tecnológicas cruciales de las últimas dos décadas: la computación móvil y la inteligencia artificial.
La compañía tiene como objetivo la producción de alto volumen a finales de este año para 18A con sus chips internos, que se espera que lleguen antes que los pedidos de los clientes externos. Mientras tanto, la entrega de 14A a tiempo para ganar contratos importantes no es de ninguna manera segura, e Intel podría optar por seguir con sus planes existentes para 18A, dijo una de las fuentes.
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