TITANYEN, LA CIUDAD DE LA ALEGRÍA
Mª Belén Sánchez Gil
Este verano tuve la suerte de ir a Haití, a conocer el orfanato de Montesinos en Titanyen, a 45 minutos de la capital, Puerto Príncipe.
aití, es un país muy pobre, bastante deforestado, y hay mucha
miseria; en el 2010
tuvieron un fuerte terremoto, donde murieron muchas personas y
todo quedó destrozado. Aún hoy hay mucho por reconstruir.
H
que nadie como ellos para enseñarnos a
amar y a vivir con alegría. Pero también, el
cariño que te dan y te requieren.. cuando ibas caminando se
peleaban por darte la mano, y
cuando te sentabas, por estar a
tu lado...como decía la madre
Teresa, “en el mundo hay más
hambre de amor que de pan”.
En el orfanato hay 78
niños y niñas, algunos
que perdieron a sus
padres en el terremoto, otros que estaban
en la calle...Lo que más
me sorprendió es la alegría que contagiaban, cómo ríen, bailan, juegan y se cuidan
unos a otros como una gran familia... “dejad que los niños se acerquen a mí”, y es
El idioma de Haití, es el creol,
una derivación del francés. Estuvimos cantando con ellos, un
rato en español y otro en creol,
jugando al baloncesto, celebrando los cumpleaños de algunos, rezando, celebrando la Eucaristía, y
disfrutando mucho cada momento. El orfanato es un paraíso. Lo único que le falta
es tener un método de conducción del
ENTREMANOS Nº 4
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