Las medusas tienen más partes de su ADN en común con los animales actuales que otras especies
Los primeros habitantes de la Tierra aparecieron hace 520 millones de años y poco o nada tenían que ver con la vida animal actual. Hasta ahora se pensaba que las esponjas eran los antecesores de los peces, de los insectos y de otros vertebrados, pero un nuevo estudio ha comprobado que no es así.
Según el científico Antonis Rokas y su equipo de investigación, los seres más antiguos de nuestro planeta se asemejan más a las medusas actuales y no a las esponjas, como defiende la teoría clásica de la evolución de la vida en la Tierra.
Este lunes, la revista Nature, Ecology & Evolution ha publicado un artículo que recoge el estudio de científicos estadounidenses que han investigado un nuevo diseño genético para resolver la cuestión de una vez por todas. La respuesta ha sido clara: las medusas tienen más partes de su ADN en común con los animales actuales que otras especies.
"El truco consiste en examinar las secuencias de genes de diferentes organismos y averiguar quién se identifican como sus parientes más cercanos," dijo el profesor Rokas.