La asociación Down Lleida ha denunciado que el dueño del pub Fissure de Lleida no dejó entrar en el local a un grupo de jóvenes con discapacidad intelectual que había acudido a divertirse, dos fines de semana seguidos. Los responsables del establecimiento, que han pedido perdón a la asociación, han reconocido que se había impedido la entrada a personas con síndrome de Down desde hace unos meses al comprobar, han alegado, que otros clientes se marchaban al verlos llegar y bajaba la facturación.
La presidenta de la asociación Down Lleida, Pilar Sanjuan, ha asegurado que formalizará una denuncia ante la fiscalía de esa ciudad por esta discriminación.
La primera vez que los jóvenes fueron vetados en el pub Fissure fue con el argumento de que no podían entrar porque se trataba de una fiesta privada. Al cabo de una semana un grupo de 14 personas con síndrome de Down y otras discapacidades intelectuales de Down Lleida acudieron al establecimiento. Pero, antes, uno de los monitores entró solo y sin problemas en el mismo, para asegurarse de que no se trataba de ninguna fiesta privada.