Entrevista a Alberto Laguarrigue
Taller de Ajedrez de Merlo
Por Coordinador Gabriel Vides
Alberto Lagarrigue actualmente es integrante del taller
de ajedrez de Merlo, con 62 años sigue esforzándose por
progresar en el juego.
-Alberto, ¿desde hace cuánto estás en nuestra
provincia?
-Mi familia y yo vivíamos en Bahía Blanca, provincia de
Buenos Aires y conocemos la provincia desde 1998.
Concretamente visitamos Merlo en esos años y nos
pareció un hermoso lugar. Finalmente decidimos
radicarnos aquí en el año 2005.
-¿Desde cuándo tenés disminución visual?
-Desde hace muchos años. La disminución visual es un
obstáculo pero por ahora hago una vida normal. Hasta
juego al ajedrez.
-¿Cuándo te enteraste de la propuesta que lleva a cabo
la ULP con respecto a la temática del juego adaptado?
Hace como cuatro años, en Merlo, se realizó una
capacitación para personas ciegas, realizada por la
Municipalidad e integrantes del Programa de Ajedrez de
la ULP, en la que brindaron una charla sobre discapacidad.
Allí conocimos a Daniel Morelli y Gabriel Perrone, dos
personas ciegas que eran instructores de ajedrez. Esto sin
duda llamó mi atención y sus palabras motivaron a más de
uno en esa oportunidad. Supe que en ese año se abría un
taller de ajedrez para disminuidos visuales y ciegos en la
ciudad, entonces me acerqué a conocer a los profes, que en
este caso eran Jorge Manzanos y Laura González, ambos
instructores de la ULP. Así comenzó mi camino con el ajedrez
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-¿Te pareció fácil aprender a jugar?
-Sigo aprendiendo. Me acuerdo que la Municipalidad nos
facilitaba el transporte para ir al taller. En la combi venían
Jorge y Laura, ayudando a subir a las personas. No todos
hacían ajedrez, otros practicaban distintas disciplinas
que se dictaban en el mismo lugar. Cuando finalizaba el
recorrido, los profes sacaban los tableros adaptados, y
nos explicaban cómo debían utilizarse; aprendimos los
movimientos y conocimos las piezas. Después de unos
meses, vino Jorge Manzanos y nos preguntó a los que
más habíamos avanzado si queríamos jugar un torneo
en San Luis. Eso fue muy motivador y todo un desafío. Así
comenzó mi aprendizaje y hasta el día de hoy continúa.
-Hablando de torneos, ¿a cuántos pudiste asistir?
-Ya perdí la cuenta. Cuando Daniel Morelli llama, es señal
de que hay que prepararse. Participé de torneos en San
Luis, La Punta, Chubut, Córdoba, Mendoza, Ezeiza (Bs. As.)
y en La Pampa. Al último torneo Héctor Lucero en la ULP
no pude asistir por razones de salud.
-En el tiempo que venís jugando, ¿qué cosas te dejó la
práctica del ajedrez?
-Creo que lo principal y que valoro más es que pude
conocer lugares nuevos, personas nuevas; también hice
amistades con algunos de ellos. Tal vez la distancia nos
separa, pero a través de llamadas telefónicas seguimos en
contacto, especialmente con los chicos de Villa Mercedes,
Ariel y Víctor. Con los demás el contacto es más acotado, ya
que no tengo Facebook .
-¿Cuáles son tus expectativas para el año que viene?
Por lo pronto, continuar en el taller, seguir creciendo, y
avanzar en las posiciones en los torneos; también practicar
más por internet. Seguramente esto costará mucho, pero
las expectativas siempre están. Mi profe Jorge me sigue
motivando, y tendré que poner un poco más de esfuerzo
en la práctica diaria.
-Gracias por tu predisposición para esta entrevista.
Espero que el año entrante se cumplan tus objetivos, y que
el taller siga creciendo.
-Seguramente nos encontraremos en las competencias.
Antes iba con mi compañero Uriel, pero como es
bombero, siempre está ocupado, así que soy el único
representante de Merlo. Este año intuyo que me
acompañará alguno más.