Nos recomienda
Pr. (p) Héctor Flores Aguayo
Iglesia Bautista El Redentor
Hualpén
Región del Bio Bío
Por 21 años parte de la Cruzada de
Literatura Cristiana en Concepción.
A
lbert Mohler nos dice que su libro ha surgido de
una serie de preocupación por el estado de la
predicación en la Iglesia.
El Dr Mohler argumenta que la predicación de la palabra
de Dios es, sin duda, uno de los sellos de la era apostólica.
Los padres de la Iglesia post apostólica más influyentes,
entre los que se incluyen los primeros apologistas, tam-
bién fueron predicadores prominentes y poderosos en las
Escrituras.
De igual modo, los teólogos primitivos como Tertuliano,
Jerónimo y Agustín, fueron predicadores expertos y erudi-
tos bíblicos brillantes.
Hombres destacados entre los Lolardos,( o wyclifista) los
reformadores magistrales y los puritanos fueron algunos
de los predicadores expositivos más excelentes y valero-
sos que el mundo haya conocido. Esto no es ninguna sor-
presa. Las escrituras dicen que la predicación es el medio
principal por el cual Dios escogió salvar a los que creen
(1Co. 1:21)
La predicación también es el vehículo principal el cual el
Espíritu Santo escogió sustentar e instruir a la iglesia cor-
porativamente (1Co. 2: 1-6) Y la misma palabra de Dios
constituye la única sustancia válida del mensaje de cual-
quier predicador.
En esta obra el Dr. Mohler nos comenta sobre el “Estado
de la Predicación actual” y la necesidad de volver a poner
la Palabra de Dios en los púlpitos de todo el mundo.
Parte del contenido del Libro lo resumimos en
Feliz Año
lo siguiente:
1. La predicación como adoración.
2. El fundamento de la Predicación.
3. La predicación expositiva.
4. Un administrador de los misterios: La autoridad y
el propósito del predicador.
5. ¿No ardía nuestro corazón en nosotros? Como pre-
dicar la gran historia de la Biblia.
6. El Pastor como Teólogo. La predicación y la Doctri-
na
7. La necesidad urgente de la predicación
8. Cuando se les predica a huesos secos. Un estímulo
para los predicadores.
Sin lugar a dudas que las páginas de este Libro tocarán las
fibras de nuestro corazón.
Todos los que estamos involucrados en la tarea de la pre-
dicación, necesitamos ser animados y desafiados a mejo-
rar nuestra forma de mensaje.
No hay nada más importante que pararse frente a un au-
ditorio semana tras semana y poder vaciar el contenido de
la palabra de Dios a corazones tan necesitados y sedien-
tos.
Dios quiere usarnos aún de mejor manera con herramien-
tas que nos vuelvan a recordar los principios y nuevos
desafíos para esta noble labor.
Recomendamos la lectura de este Libro a Todo Pastor,
Maestro, Predicador que quiera reavivar el fuego de la
predicación en su vida.
te desea