Delineado perfecto , cabello ondulado , labial perfectamente combinado con mi outfit y un dulce y fresco aroma en mi piel son características que me hacen sentir bonita y atractiva .
Muchas jóvenes cuando nos sentimos atraídas por un chico nos arreglamos un poquito más de lo que haríamos normalmente en nuestra rutina , prestamos un poco más de atención al peinado , el delineado en los dos ojos nos debe quedar perfecto , combinamos con especial cuidado el color del labial y ¡ claro ! No puede faltar el perfume . Por otro lado , los chicos también actúan de forma similar ; no completamente en el cuidado de su aspecto físico , pero sí lo expresan a través de su comportamiento , la forma en la que nos tratan cambia y es ahí en dónde podemos darnos cuenta que se sienten atraídos hacia nosotras .
La atracción nos hace sentir emociones que en algunas ocasiones son incontrolables como alegría , nervios o pena , la adrenalina aumenta cuando vemos a ese chico , incluso nos lleva a hacer locuras ; dedicamos canciones , escribimos poemas , hacemos manualidades o redactamos cartas cursis en las que declaramos todo lo que sentimos , ¡ yo lo viví ! viajé a otro país para conocerlo ¡ puedes creerlo ! La atracción nos puede hacer pensar que ese chico es el ideal , pero la verdad es que en muchas ocasiones solo son un espejismo de nuestro instinto .
Quizá sintamos un flechazo automático por esa persona , o cumpla con alguna de las características con las que siempre hemos soñado , pero ¿ es esa persona en realidad para nosotros ? ¿ es con la que nos vemos formando una familia ? O solo nos estamos creando una hermosa historia de amor en nuestra cabeza . Por esta razón no es bueno elegir a una persona solo por la atracción que podamos sentir . La persona ideal es aquella con la que puedas sentir más que una atracción física o visual , una persona con la que puedas disfrutar del tiempo , compartir valores , principios , que puedan leer y meditar juntos la Palabra . Necesitas a una persona con la no solo exista una unión física , sino una con la que realmente exista una unión de almas .
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