He aquí una muestra de "Lamentos": "A orillas de los ríos de Babilonia, sí, allí nos sentamos y gemidos, cuando recordábamos a Zión.
Colgamos nuestras arpas de los sauces. ¿Cómo habremos de cantar la canción del Señor en una tierra malvada? Que mi mano derecha
olvide su destreza, si te olvido, oh Jerusalém. Que mi lengua se pegue al paladar, si no te recuerdo, pues Babilonia es la esclavitud del
mundo y Zión es la libertad de la Hermandad".
La labor redentora de los Angeles Solares -quienes nos dan el cuerpo de la Conciencia o Loto Solar (Causal), no excluye la conciencia sobre
el cuerpo físico y de la personalidad sensible y mental humana. Precisamente, la labor del Cristo es especialmente con las masas, con las
mayorías esclavizadas por sus instintos naturales sin control consciente. La forma "lunar" o Maya (en términos orientales) no es para
destruirla sino cuando naturalmente concluye su vitalidad o disponibilidad para el alma.
En "El Misterio de Sirio", el astrónomo Robert K. G. Temple hace interesantes consideraciones sobre los dioses o devas, partiendo de las
referencias de Berosso sobre Babilonia (especialmente sobre los "hombres pez" llamados "Oe", "Odacón", entre otros, quienes entregaron
enseñanzas sobre la "vitalidad" o cómo mantener sano el cuerpo y cómo sanarlo, además de ideales y códigos éticos). Esta obra ofrece un
campo de discusión especial para los conocedores de la posible consolidación entre "El Angel solar" -quien es el Alma consciente, y la
"Forma lunar" (la personalidad pasajera de cada encarnación) –esta última, aspirante a ser redimida. El pensador Tibetano Djwal – Khul
sostiene que en el huerto de los olivos el Cristo entregó Su voluntad al Padre, tendiendo un muy débil "hilo" entre la Jerarquía de la
Humanidad y "El Lugar del Padre" en Sirio. La humanidad puede dar el paso hacia el "Nacimiento del Criso" en su corazón (con el amor en
obras) bajo la influencia de los Devas sanadores que acompañan y acatan al Cristo como Señor del Karma (del "destino"), aquel Quien tiene
la potestad o el Don de Dios para liberar de los errores.
¡Oh, la antigua verdad! Era tras era existió y convivió junto a la noble Hermandad. ¡La Verdad antigua! ¡Mantente firme a ella! (Goethe).
BREVE RESEÑA HISTORICA.
En 1928 Edmond Bordeaux Szekely (filólogo y lingüista, Ph. D. de la Universidad de París) publicó la primera traducción del Arameo al
Francés, del primer tomo del "Evangelio Esenio de Paz". La primera versión inglesa apareció en 1937. En 1974 se publicaron los tomos
segundo y tercero del mismo evangelio, en Inglés. En 1979 se publicó el cuarto tomo –también en Inglés, después de 2 años de la muerte de
Edmond, según su última voluntad.
Como se puede apreciar, estas ediciones del material Esenio precedieron a los escritos encontrados en las cuevas del Mar Muerto en 1947.
Llevado por la admiración hacia Francisco de Asís, este filólogo y lingüista logró motivar al cardenal Angelo Mercati para que le permitiera
sacar un grupo de manuscritos guardados cuidadosamente entre parafina, en las bóvedas del Vaticano. Se trataba de este material, que el
lector puede ahora conocer y valorar.
Este material fue enviado por "Swallow" cuando la I.B.S. (Sociedad Internacional Biogénica) estaba en Costa Rica (América Central). Tal
sociedad fue fundada por Romain Rolland, premio Nobel de Literatura en 1915, conjuntamente con Edmond Bordeaux S.
Edmond B. publicó un material muy interesante sobre los origenes del ajedréz bajo el título "El Juego persa de Asha", además de reconocer
los aportes de Zoroastro. Por ello se puede apreciar un punto de vista amplio –para su época, y no fanático, pudiéndose reconocer los
elementos culturales comunes que nos acercan, además de los que nos diferencian.
Los intereses del materialismo financiero corrupto (el que rechaza patológicamente la recomendación del verdadero "Nuevo Orden Mundial"
sugerido en "La Exteriorización de la Jerarquía" de Alice A. Bailey por la Hermandad de la Luz mediante el Maestro Djwal - Khul, ante el otro
"cosmético" que pretende hacer ver cambios "para que todo siga igual"), y la manera violenta de querer solucionar una serie de conflictos
ancestrales (y familiares) -por parte de sus líderes (perjudicando la imagen cultural de los pueblos de sus respectivas naciones), no debiera
ser motivo para satanizar a su cultura en general, hecho que incluye al pueblo hebreo; éste no tiene por que cargar con los desaciertos de
sus líderes militaristas radicales (y ahora, de algunos considerados prudentes o de una línea mediadora, arroyados por la avalancha del
contagioso terrorismo de sus adversarios).
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