Eduardo
Víctor
Haedo
junto al
“Che”
Guevara
calamitoso. Fueron reconstruidas las
rutas 1,3,5,6,8,9 y 26. Se completó la
extensión de la ruta Interbalnearia que
hoy lleva su nombre. También se realiza-
ron importantes obras de reconstrucción edi-
licia.
Es necesario mencionar también, la firma
de un acuerdo con Argentina por el que se
establecía que el Rio de la Plata era un rio
interno de los dos países y que sin definir lí-
mites precisos dejaba atrás la postura argen-
tina de la costa seca que no le daba ninguna
jurisdicción al Uruguay sobre el río.
En cuanto a uno de los propósitos a
priori más importantes del gobierno
blanco y ruralista como era el de dete-
ner la emigración desde el campo a la
ciudad y darle rentabilidad a los esta-
blecimientos pequeños y medianos, el
fracaso fue total.
Ni siquiera se dotó al Instituto de Coloniza-
ción de más recursos para ampliar su opera-
toria, al contrario, se disminuyeron.
En cuanto a la política internacional,
no siguió en absoluto los senderos de
dignidad nacionalista marcados por He-
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rrera y su política. El gobierno herrero ru-
ralista se alineó constantemente a las direc-
tivas del gobierno de los EEUU (Son los años
de la expulsión de Cuba de la OEA).
Hay que recordar que el 8 de abril de 1959,
a días de haber sumido el primer gobierno
blanco y atrincherado en su quinta de la en-
tonces Avenida Larrañaga, murió Herrera, en
“pobreza edificante”, como recordó Eduardo
Victor Haedo. Su último mensaje a los conse-
jeros herreristas, fue: “¡Cuidado con hacerse
cipayos!”. Sus restos fueron velados en el Pa-
lacio Legislativo y llevados a hombros has-
ta el Cementerio Central por una gigantesca
multitud que llegó de todos los rincones del
país.
Para concluir hay que comentar la no par-
ticipación en el primer gobierno blanco del
sector más progresista del Partido Nacional,
la UBD (Unión Blanca Democrática) de Daniel
Fernández Crespo, un hombre de pensamien-
to desarrollista que ganó en ese momento las
elecciones en la Intendencia de Montevideo.
Este sector, la UBD, sería el vencedor de
las siguientes elecciones nacionales del año
1962.
Leonardo Piccininno
DOS MOMENTOS HISTÓRICOS
DE NUESTRO FÚTBOL URUGUAYO
ESTE AÑO SE CUMPLIERON 50 AÑOS DE DOS HECHOS
FUTBOLÍSTICOS HISTÓRICOS, SUCEDIDOS EN UN MISMO DÍA,
EN EL ESTADIO CENTENARIO.
FINAL: BELLA VISTA-HURACAN
BUCEO
El domingo 13 de octubre de 1968, por
la mañana, en nuestro principal estadio
de fútbol en Montevideo, Bella vista y
Huracán Buceo jugaron la final del Cam-
peonato uruguayo de Primera B, por el
ascenso a Primera División.
Fueron 60.000 personas que llenaron
el Estadio Centenario, record histórico,
es la mayor concurrencia en la historia
del fútbol uruguayo, entre dos clubes
llamados chicos. Se vendieron exacta-
mente 53.583 entradas, que dejaron $
5.688.400 de recaudación.
Hay un hecho destacable, el boom del
equipo de la playa, Huracán Buceo, que du-
rante la segunda mitad de la década de los
años sesenta, protagonizó grandes campa-
ñas tanto en la Divisional Extra como en
Primera B.
Su pequeña hinchada, fue sumando adep-
tos en Montevideo. Gente identificada con
otros clubes, que a su vez simpatizaron
con la mascota del “Topo Gigio”, persona-
je querible, de un programa de televisión,
un ratoncito que hablaba con el actor Juan
Carlos Mareco “Pinocho”.
El trico playero, como se lo conoce, luce
los colores, negro, blanco y rojo, hizo de
local en el Parque Central, lugar que le fue
quedando chico ante la convocatoria en
cada fecha de aquel campeonato de la “B”
de ese año., ademas de llevar gente cuando
jugaba de visitante.
El campeonato de la “B” del año 1968 fue
muy parejo, a falta de dos fechas para fi-
nalizar el torneo, Huracán Buceo y Wan-
derers eran los punteros, con 26 puntos, y
Bella Vista los seguía a tan solo un punto de
diferencia.
La última fecha, se enfrentaron el club
playero del Buceo con Fénix, en el Parque
Central, en tanto Bella Vista recibió a Wan-
derers en el Parque Nassazi, ambos esce-
narios repletos de aficionados.
El equipo “papal” gano 1 a 0, en tanto los
del Buceo, no pudieron superar a Fénix,
empatando 1 a 1; de ésta forma igualaron
la primera posición, Bella Vista y Huracán
Buceo.
Fue necesario jugar un partido final en-
tre los papales y los trico playeros; se
jugó esa mañana del domingo 13 de oc-
tubre de 1968, en el Estadio Centenario.
La final comenzó a las nueve y media,
pero desde las ocho de la mañana las
tribunas ya estaban casi llenas.
El estadio tenía mayoría de simpatizantes
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