ALCOHOLICOS ANONIMOS
UNA MANO AMIGA PARA VOLVER A NACER
EL 10 de junio de 1935 comenzó a funcionar
alcohólicos anónimos (A.A.), entidad que hoy
nuclea a unos 116 mil grupos de apoyo en 180
países del mundo, con el aval de más de dos millones de personas sobrias gracias a este método. La organización se apoya en tres premisas
básicas: la recuperación del alcohólico, unidad y
servicio; y una revelación: “ya estuvimos allí”.
De esa formar desarrolla su función para rescatar a todas aquellas personas sumergidas en el
vicio del alcohol.
El revolucionarlo método desarrollado desde
entonces por la entidad, se registró en el libro de alcohólicos anónimos conocido también
como Bigbook , en el que se describen los doce
pasos para salir del alcoholismo. El último sea
tal vez el más importante, “ayudar a los demás a
superar su adicción”.
Como se sabe, el alcohol es una de las principales causas de muerte en la Argentina, que es
el segundo país más consumidor de América
Latina. Además es la sustancia que se cobra el
6% de todas las muertes en el mundo, con 3,3
millones de decesos al año según la organización
mundial de la salud.
En la Republica Argentina la entidad comenzó a funcionar el 18 de diciembre de 1953, y en
la actualidad existen diseminados 900 grupos
en todo el país con más de diez miembros. En el
barrio de Liniers el grupo de alcohólicos anónimos funciona en el servicio de San Cayetano
(Cuzco 220) y se reúne todos los martes,
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jueves y sábados a las 19y30 horas. Hasta allí
se acerca en cada encuentro casi medio centenar de personas de diversas edades y condición social que se ayudan mutuamente. Nada se
les pide a los alcohólicos que asisten al grupo,
salvo el deseo de recuperarse.
Para conocer más detalles sobre la metodología empleada en la organización , el comité de
información pública del grupo Liniers elaboró
un informe en el que se indica cuáles son sus
pautas de trabajo y cuales aquellas cosas que
tiene vedadas.
Los miembros de A.A. compartimos experiencias con cualquiera que busque ayuda para su
problema con la bebida, sea cual fuera su procedencia, y brindam os un servicio “persona a
persona” explican y subrayaron que el programa de A.A. enunciado en los doce pasos, ofrece
al alcohólico una manera de desarrollar una vida
satisfactoria sin alcohol. Además los miembros
de A.A. llevan sus reuniones a instituciones de
tratamiento y correccionales.
Lejos de ser un programa hermético en casos
especiales se discute en las reuniones semanales del grupo. Por otra parte y para dejar en
claro que cosas no incluye el programa, el comité
remarco que A.A. no ofrece a los alcohólicos la
motivación inicial para recuperarse, ni trata de
persuadirlos para que se hagan miembros, además la entidad internacional no patrocina ni participa en investigaciones y en cuanto a la importancia del anonimato de sus integrantes, resal-