“LA REDOBLONA”
LA MEJOR MURGA DE LOS CARNAVALES PORTEÑOS
Y hablando de los carnavales de esta orilla
reflexionemos sobre los carnavales porteños, que estos sí son populares e inclusivos. Cualquiera puede integrar una murga,
nadie tiene que ser profesional para cantar
y bailar, así toda la familia se junta para salir
en los corsos desde los mas chiquitos hasta
los mas grandes que se atreven.
Lamentablemente creo que hoy los carnavales en Buenos Aires están corriendo
el riesgo de ser prohibidos o excluidos
a algún lugar donde “no molesten” a los
vecinos. Hace un tiempo que vienen ocurriendo cosas raras, agresiones a murgas y
comentarios en radios y periódicos donde
se critica a los cortes de calle que originan
los corsos porteños y sospechando como
piensan las nuevas autoridades que nos
gobiernan, no sería nada raro que intenten
quitarlos o recluirlos a algún rincón perdido de la ciudad. Debemos estar atentos y
prepararnos para luchar por esta fiesta
popular.
Y comentando lo que nos dejó el carnaval
de nuestra ciudad quiero destacar un corso
muy especial que se denomina “El Tablado
de la Quimera”. Este corso se realiza solamente en dos días del carnaval porteño y
es especial porque ahí se ven espectáculos
que no figuran en los otros corsos porteños
y se escuchan otros ritmos, que sólo ahí es
posible encontrar.
El corso del “Tablado de la Quimera”
se realiza en la puerta de la radio FM La
Tribu,sobre la calle Lambaré a pocas cuadras del Parque Centenario y lo organiza la
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murga “La Redoblona” que es la mejor murga del carnaval porteño.
La murga La Redoblona lleva 19 años
transitando por los corsos porteños y es
una murga muy especial ya que no responde a los cánones de la murga porteña tradicional y tampoco es exactamente lo que
se denomina “estilo uruguayo”. Entonces
¿Qué es? Se preguntaran ustedes, pues
ellos mismos se definen como una murga “rioplatense” ya que han fusionado
el baile y el desfile de la murga porteña
con el escenario de la murga uruguaya y
además han incorporado la acrobacia y
malabares del circo.
Es la murga mejor vestida de las de más
de cien que conviven en Buenos Aires y
además su vestuario tiene la particularidad,
que respetando los colores que tiene asignada, todos los años lo cambian según la
temática de su canto. Los maquillajes son
excelentes, podríamos decir que hecho por
profesionales lo mismo que los sombreros.
El espectáculo de este año es magnífico,
tanto global como particularmente. El desfile con que se presentan en el corso es único
y admirable, con gran variedad de ritmos y
una coreografía estupenda. El canto en el
escenario cumple con todos los requisitos
de los manuales de buenas murgas. Con
muy buenas glosas y canción de presentación, muy buenos cuplés, salpicón y una
retirada digna del espectáculo presentado.
Una cosa fundamental que tienen que tener las murgas son las letras y en este caso