Ahora estimado lector imagine cuántos
niños más, se podría convocar en otros
deportes tanto de equipo, como
individuales, imaginemos además que
los insumos que requieran en general
cualquiera de los deportes podrían
surgir de cooperativas, hablamos de
indumentaria y materiales para las
distintas disciplinas.
Podemos señalar tres aspectos
que son muy positivos de cara al
futuro:
uno,
la continuidad
y
consolidación
del
proyecto
de
“Institucionalización de los procesos
de las selecciones y la formación de
sus futbolistas”, que lidera Óscar
Tabárez. Otro, Plazas XXI donde el
Estado uruguayo hace una gran
inversión para
recuperar las plazas pensando en
deportes y con vínculo a áreas sociales del
barrio o del pueblo. Y un tercero, el
aumento de presupuesto a la Dirección
Nacional de Deportes que entre 2005 y
2012 se multiplicó por nueve en beneficio
de las 56 federaciones deportivas que hay
en Uruguay.
En tiempos que el poder Ejecutivo
en Uruguay lanzó una serie de medidas
para la discusión en la sociedad y leyes
para su aprobación en el parlamento
contra la violencia en todas sus formas,
por la vida y por la convivencia ciudadana
y en el marco del desarrollo de los Juegos
Olímpicos, está bueno pensar un país,
donde el deporte no sea sólo competencia,
sino un estilo de vida.
Andrés Correa
Presentaci