EL TINTERO DE ORO MAGAZINE Nº 4 EL TINTERO DE ORO MAGAZINE Nº 4 | Page 94
que tendría que hacer, hasta cómo se ponían las
dichosas compresas. Para que la clase resultara
favorable gastó un paquete entero… hasta que
supo ponerlas de la forma correcta.
...No fue ningún trauma ni dolor de cabeza, gra-
cias a su clase magistral.
...Cuando por fin me bajó, llegó la charla sobre
sexo, la cual la mayoría de padres habría evitado
argumentando mil y una tonterías. Sin embargo,
el mío, se sentó y me hablo de sexo, de métodos
anticonceptivos, de ginecólogos… una charla
muy completa e instructiva.
...Cuando me abre la puerta se sorprende, me
besa y me invita a pasar a la cocina. Está hacien-
do la comida, arroz caldoso de conejo. Me invita
a quedarme, acepto, tonta no soy.
...Se sienta y me pregunta por mi visita a esas
horas, si hay algún problema…
...Lo miro llena de ternura, como le quiero, cuán-
to le debo, cuanto le necesito, más si cabe a
partir de ahora.
Le cuento mis recuerdos.
Que va a tener que enseñarme.
Que va a ser abuelo.
Yyyy
¡Es una nena!
Nos miramos a los ojos, y entonces sonreímos.
94