EL SEÑOR DE LAS SOMBRAS (Biografía no autorizada de Alvaro Uribe) 1 | Page 113
Al terminar la administración Gaviria, el gobierno y un grupo de
guerrilleros del ELN firmaron un acuerdo: estos últimos dejaban
las armas, y el primero les facilitaba su reincorporación a la vida
civil. En desarrollo del mismo, siete familias compuestas por
antiguos miembros del ELN recibieron la finca “La Galleta”, donde
crearon la Sociedad Agropecuaria Horizontes Ltda. Dentro de ese
grupo figuraban Uberney Giraldo Castro, John Jairo Muñoz Zapata,
Leonel Pascual Sánchez, Pastor Jaramillo Cadavid, José Evelio
Gallo Gallo, Guillermo León Calle Giraldo, Guillermo León Valencia
Agudelo, José Aristizábal, Fabián Tamayo Gil, Heriberto de Jesús
Londoño Sánchez, Juan Julio Sepúlveda Agudelo, Mario de Jesús
Muñetón y Nelson Alfredo García Giraldo. Sus problemas
comenzaron el 23 de enero del año 2000. A las 4:30 de la
mañana de ese día, un grupo de paramilitares fuertemente
armados, que vestían uniformes del Ejército Nacional, llegaron a
“La Galleta”. Los individuos pintaron insignias y letreros alusivos a
su organización, gritaron que en esa finca vivían los autores de las
“pescas milagrosas” ocurridas en la Glorieta Don Diego (ubicada
entre los municipios de El Retiro y la Ceja), sacaron a los
campesinos de sus casas, los amenazaron y retuvieron a
Guillermo Adolfo Parra López, director del colegio rural, a Wilfredo
Cañaveral, hijo del presidente de la junta de Acción Comunal, a
José Evelio Gallo, a Ubemey Giraldo Castro y a John Jairo y David
Muñoz Zapata. Al terminar el asalto, destruyeron o robaron varios
elementos y les advirtieron a los moradores que seguir en la finca
sería para ellos “muy peligroso”. En la vereda El Cairo, ubicada
entre Montebello y Santa Bárbara, le dieron muerte a Parra López
y dejaron en libertad a los hermanos Muñoz con la orden de que
avisaran que los demás retenidos serían asesinados. El cadáver
de Wilfredo Cañaveral apareció en La Ceja. Días después se supo
de los otros dos secuestrados, cuando el Ejército convocó a una
rueda de prensa para informar que dos miembros del ELN habían
sido dados de baja en Carmen de Viboral en enfrentamientos con
las tropas regulares. Los medios pudieron comprobar que los
presuntos guerrilleros no eran otros que José Evelio Gallo y
Ubemey Giraldo. Los cadáveres vestían prendas de uso privativo
de las Fuerzas Militares. En su informe, los militares dijeron que
“los subversivos portaban una sub ametralladora mini-uzi con
silenciador, dos proveedores para la misma, granadas de mano y
minas antipersonales” y que pretendían dinamitar una torre de
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