“El Poder de las Afirmaciones, para lograr Todo lo que Desea...”
un ritmo de vida muy alto, y después de esto en su cuenta bancaria sólo le
quedaron 50000 Ptas. La presión que estaba soportando era demasiada. Lo único
que veía en su futuro eran obstáculos. Pensaba que su situación era un caso
perdido. Cuando me pidió consejo estaba considerando la idea del suicidio.
Trabajando juntos, descubrimos lo que quería. Lo único que le importaba en la
vida era el dinero. Su deseo era ser asquerosamente rico.
Este era un deseo sincero en él. Había vivido negándolo durante años porque
creía que pensar así era de tener una condición egoísta y ser mala persona. Pero,
una vez que se dio cuenta de que la verdad era esa, acabó admitiendo que lo que
más quería en el mundo era ser muy rico. Yo no lo juzgué por ello.
Simplemente le dije lo que tenía que hacer Para conseguir que su deseo se
hiciera realidad. Él formuló unas cuantas afirmaciones y siguió mis instrucciones.
Poco después de esto, descubrieron al verdadero culpable del desfalco. Por
supuesto que no era él. Mi amigo se trasladó a Nueva York y empezó a trabajar
como agente de bolsa. Hace poco que supe de él. Me dijo que sus beneficios
netos habían llegado a ser de más de 250 millones de ptas.
Había conocido a la mujer de sus sueños y se estaban mudando a una de sus
propiedades en Idaho. También me aseguró que el dinero ya no era una obsesión
para él. Había conseguido tener independencia financiera y ahora quería disfrutar
de la vida a lo grande -¡cómo ranchero! Estaba tan emocionado con lo que le
esperaba que casi no cabía en sí mismo.
Todo lo que usted afirme, sea lo que sea, se hará realidad. En el caso que acabo
de contar, el hombre deseaba tener dinero. Yo le hice ver que era un deseo
totalmente válido. No le juzgue por tener ese deseo. Una vez que consiguió su
meta económica, fue capaz de reestructurar su vida y darse cuenta de lo que
realmente quería de forma más profunda. Sus deseos cambiaron, lo cual es algo
normal. Desee lo que desee, inténtelo. No lo niegue. Acepte y vaya a por ello. Y
no sienta remordimientos. Luche siempre por lo que desee en cada momento. De
lo que se trate, no importa. Lo conseguirá dé todos modos.
Una vez conocí a una mujer que me dijo que deseaba que los hombres la
llamaran por teléfono. Quizás suene trivial, pero para ella era un deseo muy
fuerte en ese momento de su vida. Deseaba esto más que ninguna otra cosa.
Cuando se dio cuenta de que ese era su deseo, comenzó a escribir afirmaciones
para hacerlo realidad.
Seguro que al principio pensó que este procedimiento era una tontería; pero
deseaba tanto esas llamadas de teléfono que hubiera intentado cualquier cosa.
Su afirmación decía, "Yo, Sandra, recibo gran cantidad de llamadas de hombres
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