el pescador | Page 12

Al acabar de ver este suceso de pronto apareció un tiburón malvado, quien había hechizado a la hermosa joven por envidia, pues era la joven más bella de todos los puertos. El tiburón intentaba levantar la marea y poder así hundir la barca.

El joven hizo de todo por mantener su barca a salvo, y proteger a la joven, pero fueron tan grandes las olas del mar que los dos terminaron envueltos en las grandes olas del océano. Muy asustada la joven comenzó a llorar