Manteníamos por tanto una amistad forzada e imperfecta que tarde o temprano terminaba desapareciendo, pero la increíble experiencia que hemos vivido
nos ha ayudado a retomar desde cero esas amistades que considerábamos perdidas, a conocer mejor
a otras personas y cambiar por completo el concepto que teníamos de ellas y a dar, compartir y confiar,
llegando a la conclusión de que los amigos que considerábamos como verdaderos, van a ser para toda
la vida.
La magia de Venecia que incitaba a descubrir cada
uno de sus escondites, la majestuosidad de Viena y
la belleza de Praga hacían que cada foto, cada
buen momento vivido, cada anécdota, cada enfado
y cada abrazo se convirtieran no solo en un simple
recuerdo del viaje por Europa, sino en el recuerdo
de nuestro viaje por el colegio y por una de una de
las mejores etapas de nuestras vidas.
Porque ¿Qué amigo es el que buscaréis para matar
las horas?
Buscadlo siempre para vivir las horas.
Porque él está para llenar vuestra necesidad, no
vuestro vacío.
Y cuando os separéis de un amigo no sufráis, porque lo que más amáis en él se aclarará en su ausencia, como la montaña es más clara desde el llano
para el montañés.
El Profeta, Khalil Gibrán
María Ruiz Díaz-Otero
2ºA Bachillerato
Aunque sabemos que todo lo que empieza en algún
momento tiene que acabar, eso no implica que no
nos duela que suceda.
Después de una semana llena de emociones y tras
haber convivido con personas maravillosas que se
habían adaptado a nosotros y a las que nos habíamos adaptado, ese momento llegaba a su fin. Aunque en apenas dos días volveríamos a ver a nuestros amigos, empezábamos a sentir el vacío de la
despedida.
Pero no sólo del adiós a un viaje maravilloso, sino
un adiós a un camino que poco a poco vamos dejando atrás, aunque las experiencias y enseñanzas
que aprendimos recorriéndolo siempre nos acompañarán.
Un joven dijo: Háblanos de la amistad.
Y él respondió:
Vuestro amigo es la respuesta a vuestras necesidades.
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