El Misterio de Belicena Villca El Misterio de Belicena Villca Edición 2017 | Page 434

¨El Misterio de Belicena Villca¨ de evitar que miradas indeseables pudiesen caer sobre un tema que las más poderosas fuerzas sinárquicas estaban interesadas en ocultar. Y me volvió a alertar sobre la, por entonces incomprensible, circunstancia de que Yo constituía la presa que Ellos se propondrían cazar. En fin, Neffe; con respecto a la información era fácil comprobar que Tarstein estaba en lo cierto y que no admitía una explicación sencilla de la ocultación druídica que se efectuaba en Inglaterra. Esto saltará a la vista si realizas una comparación esclarecedora. Por ejemplo, lee el artículo “Druida” del Diccionario Enciclopédico de Montaner y Simón, el cual está editado en Barcelona a fines del siglo XIX, y no te quedarán dudas de que la publicación inglesa está afectada por un extraño raquitismo, aunque en el ensayo español se advierte el mismo propósito de dejar bien parados a los Druidas. Acto seguido, tío Kurt puso en mis manos el Tomo VII del Diccionario Enciclopédico, obra en 25 tomos que indudablemente tenía menor envergadura que la Enciclopedia Británica. Busqué el artículo aludido y leí: DRUIDA (del lat. druida; del címrico druiz o deruiz, de dervo, encina): m. Sa