A-MORT
Sin la acción de guerra de los dioses liberadores no se
podrá encontrar el A-mort, el recuerdo original que el
UNO no puede plagiar.
Es lo mismo que pasa con el Fuhrer, lo que despierta
en nosotros es un recuerdo de A-mort original, su voz
que es música para nuestros oídos con sus discursos
llenos de valor y nostalgia, la nostalgia infinita que
nos transporta a esas épocas pasadas de guerreros, de
unión, de valores y de A-mort.
El demiurgo pretende que se deje todo eso, que
renunciemos al A-mort, pues él y todas sus huestes
malditas e impuras se pueden consumir en el
mismísimo infierno. El A-mort reminiscente dice:
¨Vuelve a estos brazos de nuevo, y tiende aquí tu
cuerpo, el compás de este trémulo corazón redobla
como un tambor, late por ti, sangra por ti, desconoce
su sonido. Pero el tambor de los tambores y la
canción de las canciones no se podrán comparar con
lo que siento por ti. Una vez poseí la más rara de las
rosas que jamás haya florecido pero el invierno cruel
helo su brote y robó mi flor demasiado
pronto…..oh!!!! Soledad….oh!!!! Desesperanza iré
a buscar en los confines del tiempo para encontrarla;
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