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combatientes yihadistas que han resistido hasta el final pero que
han acabado rindiéndose ante las presiones de las FSD.
El lunes, esas fuerzas, apoyadas por Estados Unidos, dieron un
plazo de dos días a los radicales para que se rindieran o, de lo
contrario, irrumpirán en la zona en la que se encuentran, que tiene
un área de no más de 700 metros cuadrados.
La evacuación iba a tener lugar este martes, pero ha sido pospuesta
hasta hoy debido a que son necesarias muchas horas para
trasladarlos a todos con sus objetos personales y realizar los
trámites para su reubicación.
Campamentos desbordados
Los hombres serán llevados a distintos centros de detención para
ser interrogados en la vecina provincia de Al Hasaka, en el noreste
de Siria, mientras que los menores y las mujeres serán enviados al
campamento de Al Hol, situado también en Al Hasaka, al norte de la
zona de combates.
Ese campamento acoge a unos 29.000 desplazados procedentes de la
zona de Hayín, próxima a Al Baguz, que huyeron de los combates
entre las FSD y el EI desde finales de 2018 hasta la actualidad, y se
ve desbordado por la llegada de nuevos desplazados cada día, según
avisó hoy la Oficina de Asuntos Humanitarios de la ONU (OCHA).
También denunció las restricciones de movimiento a los que son
sometidos estos desplazados, ya que muchos hubieran preferido
dirigirse a otros lugares para buscar refugio en casa de familiares y
amigos, pero fueron forzados a ir a ese campamento. Durante este
martes, al menos 30 civiles salieron de Al Baguz por su propio pie,
tal y como pudo constatar EFE desde el extrarradio de la población.