ESTUDIOS REALIZADOS EN EL ECUADOR
El estudio pionero en la investigación en Ecuador se realizó por iniciativa del
Municipio de Quito en el 2.007 adoptando el título de “Femicidio o el riesgo
mortal de ser mujer” mismo que sustenta un análisis de los riesgos y
expedientes existentes en la Unidad Provincial de Medicina Legal de la Policía
Nacional en donde el estudio emite la cantidad de 1.831 muertes violentas de
las mujeres entre los años de 2.000 a 2.006.
Ecuador mantiene una tasa de homicidio de mujeres moderada en la provincia
de Esmeraldas presenta la tasa más baja entre las provincias con reportes de
femicidios.
CAUSAS RECURRENTES POR LA QUE EL FEMICIDIO NO SE DA A
CONOCER
Falta de información sobre muertes violentas de mujeres en general, y del
feticidio, en particular.
Vacíos de información en los registros y documentos oficiales.
Ausencia de investigación criminal apropiada.
Diferencias en los procesos seguidos en diversas unidades de la Fiscalía.
Dificultad para acceder a la escasa información recogida en las oficinas
judiciales.
De esta forma se entiende que la violencia en contra de las mujeres no es otra cosa
que el control que los hombres ejercen, en función de este orden patriarcal, sobre
las mujeres, sus vidas, sus cuerpos, sus tiempos sus decisiones, con el propósito de
mantenerlas en un lugar inferior socialmente asignado. El grito, la bofetada, el
puñetazo, el insulto, la humillación, la violación o el femicidio son manifestaciones
de esa violencia, pero también son los recursos para ejercer ese control y mantener
la subordinación.
Para mantenerlas relaciones desiguales de poder entre los géneros y los privilegios
que conlleva este orden, los hombres agresores a título personal ejercen violencia
contra las mujeres conocidas y desconocidas para beneficio propio o grupal. Pero
este tipo de violencia también puede ser ejercida por colectividades e instituciones
que en su discurso, normas y práctica ejecutan los mandatos estructurales de
dominio y control sobre las mujeres.