El Enfoque por Competencias en las Ciencias Básicas Ebook | Page 196

MGR. ING. URIEL R. CUKIERMAN · ING. GUILLERMO C. KALOCAI apelando al conocimiento y a la reflexión en la acción [5]. El aprendizaje activo pone de relieve la participación por parte de quien aprende, prin- cipio básico de la pedagogía que sin embargo muchas veces en la universidad no encuentra su correlato en las prácticas docentes: “Bien vista, una pedagogía activa no debería ser considerada una innovación. Porque el aprendizaje es activo o no es. No hay opción (...). Quien no tiene un rol activo en su proceso de aprendizaje, sencillamente no aprende” [6]. Uno de los principales aportes de este enfoque es reflexionar sobre “Cuál es la finalidad de lo que se enseña: llenar la cabeza de información que se retenga y sea reproducida en los esquemas y textos mostrados en la escuela, o formar un individuo con capacidad propia de razonamiento y con un conjunto de habilidades que le permitan resolver situaciones cotidianas” [7, pp. 33]. En este sentido, el autor plantea que este enfoque puede tener una modificación en los modelos de enseñanza tradicionales si es que se logra pasar de los modelos centrados en la información a modelos centrados en el desempeño con participación activa del estudiante. Por otra parte, numerosas investigaciones indican que los sistemas de evaluación imple- mentados por los docentes influyen en el proceso de aprendizaje de los estudiantes [7][8] [9], por ejemplo en el enfoque de estudio ya sea superficial o profundo que ellos adoptan, entre otras El sentido concedido a la evaluación en el campo educativo ha ido variando a lo largo del tiempo. En los años 60 Michael Scriven distingue entre “evaluación formativa”, refi- riéndose a la información que se usa para introducir mejoras en un programa educativo que aún se encuentra en desarrollo, y “evaluación sumativa”, que se utiliza para valorar el resultado final del mismo [10]. En el enfoque formativo el estudiante adquiere un rol protagónico al plantearse una meta de aprendizaje a seguir, comparar el nivel actual de su desempeño con dicha meta y comprometerse en una acción orientada por el docente que conduzca a la disminución de la brecha. Esto requiere que los profesores y los estudiantes tengan una comprensión y una apropiación compartida de los objetivos de aprendizaje y que los estudiantes sean capaces de supervisar su propio mejoramiento [11]. Diferentes investigaciones han reve- lado que los estudiantes mejoran su aprendizaje cuando se involucran activamente en el proceso de evaluación [12][13]. El informe más influyente y ampliamente citado sobre la evaluación formativa ha sido la revisión realizada por Paul Black y Dylan Wiliam [14]. Los autores definieron la evalua- ción formativa como: “aquella que abarca todas las actividades llevadas a cabo por los 196 Ir al Índice 3