El Corán y el Termotanque | Quinto número Año 2, número 5 | Page 13
Apuntes sobre
lo autobiográfico
«Escribir, hoy en día, es
constituirse en el centro del proceso de la palabra, es
efectuar la escritura afectándose a sí mismo, es
hacer coincidir acción y afección, es
dejar al que escribe dentro de la escritura».
Roland Barthes
Por Gabby De Cicco
Ilustra Celeste Ciafarone
Yo
una siendo dos.
2. Sutura. El dedo recorre la cicatriz y mira hacia los ojos
de la que nada pregunta. «Me vaciaron» responde ante
esa mirada. El dedo se transforma en mano que cubre
el monte de Venus, y todo luego se resume en un largo
beso.
3. El cuerpo deja de sangrar. Deja de hacer un trabajo
pro-creación para comenzar otro: los calores que no
avergüenzan sino que marcan el desvío final a toda
regla: no ser más útil al sistema como posible máquina
de hacer carne para la guerra o el hambre.
1. El yo es un ojo. Gran cíclope. Recorta su parcela privada
de memoria y escribe, pinta, filma desde allí.
Fig. 2. El ojo.
b
Fig. 3. El corazón.
a
yo
b
a
2. Cuando digo yo siempre miento; o siempre realizo una
performance que me permite hacerte creer que soy real.
3. «Cuando digo yo, siempre soy»; siempre soy yo quien
lo dice. No miento, me re-presento tal cual soy. Jamás
usé maquillaje.
4. Milagro del yo cuando se despliega en ellas, en nosotres.
Cuando la tensión supone deseo en la pluralidad.
5. Monto la cámara y me filmo: «la lengua lentamente
dibuja los contornos de mis labios cubiertos por un bri-
llo apenas rosa». ¿Fue antes o después de chuparla? No
hay memoria clara para ese yo editado en super 8.
6. Memoria de un yo en un baño de un bar. Graffiti anémico.
7. «Amo a Carlx», firmado Claudix. Fluye lo dinámico
ante la duda.
8. Autobiografía. Complejo sistema, nervioso.
c
d
4. La piel erizada. La mitad de su cuerpo erizado. Ella,
cuerpo espín, se enrosca, escapa al goce o se entrega en
mordisco salvaje.
5. Rouge. ¿Labios vampiros o afeites femme?
6. Rouge en el cuell