Círculos Cromáticos
Se estima que el ojo humano puede distinguir alrededor de 10 millones de colores.
La cifra anterior, aunque parezca increíble, es una estimación a la baja de los colores que podemos ver. La realidad es que el color es una percepción y depende directamente de sus tres dimensiones físicas para poder verlos. Estas dimensiones son la saturación, la brillantez y el tono. El resultado de todo este cocktail son tantas combinaciones que el número total de colores que nuestro cerebro puede procesar es infinito.
Colores primarios y secundarios El origen de todos esos millones de colores son los que conocemos como Colores Primarios.
Los colores primarios son aquellos grupos colores en los que ninguno de los colores que lo forman puede conseguirse a través de la suma de los colores restantes del grupo.
Colores primarios Según la disciplina que los utilice los colores primarios son: El cyan, el Magenta y el Amarillo o el Rojo, Verde y Azul.
Colores Secundarios Son los derivados de la mezcla de dos colores primarios. Son el Violeta, el Verde y el Naranja.
Los colores terciarios Los colores terciarios son aquellos que surgen de la combinación de un color primario con otro secundario. Esto da lugar a distintas variedades de tonos que van desde el rojo violáceo, el rojo anaranjado, al amarillo anaranjado, pasando por el amarillo verdoso, el azul verdoso y el azul violáceo.
El círculo cromático El círculo cromático no es más que una representación gráfica de los colores. Puede ser un círculo que represente sólo los colores primarios, o pueden sumársele los secundarios y los terciarios.
El primero en hacer un esquema de color de este tipo fue Isaac Newton allá por 1666. A lo largo de los años, han surgido numerosas variaciones del diseño básico pero la más habitual es la rueda de 12 colores.