El Circense Enero 2015 | Page 26

a ri o laje a il t u qu s sin ve y m colokolo: cafe del pueblo mARIA COLOKOLO En Marruecos la vida en la calle pone a prueba los sentidos: olores, sabores, sonidos. El espacio público es un hervidero de ir y venir, de charlas, de espacio de trabajo, de intercambio y entre medio de tanto barullo el café como expresión de una cultura y de una realidad que puja entre la calma tradicional y la vorágine de la exigencia de progreso. En mitad de las plazas públicas, en frente de un café cualquiera, podemos encontrarnos a los artistas de Colokolo representando la metáfora del doble Marruecos: lo popular sumado a la explosión creativa de una compañía que está trabajando para cambiar el panorama circense en el país. Colokolo es una asociación fundada en 2007 por Dominique Valory y Pascale de la Orden que nació como proyecto para trabajar con niños en periodo de vacaciones y enseñarles diversas prácticas artísticas, sobre todo las artes circenses. Tras la muerte de Dominique en 2012, Colokolo se convirtió en Colokolo des arts de la rue (Colokolo de artes callejeras). La nueva formación se apoyaba en la creación multidisciplinar reuniendo a circenses salidos de la Escuela nacional de Circo Shemsy, técnicos de bricolaje y jóvenes apasionados por el trabajo en el espacio público y por compartir su arte con la gente. Una arriesgada mezcla que logra conjugar de forma insólita y original las artes circenses con la danza y el teatro. CRECIENDO JUNTOS En 2014 se unen a los primeros miembros de Colokolo varios artistas jóvenes que se encontraban realizando la formación en la Escuela de Circo Shemsy, ubicada en la ciudad de Salé, cerca de Rabat. Juntos crearon su primer espectáculo Qawha nos nos, una representación de los cafés populares marroquís que apuesta por llevar lo cotidiano a la calle reinventando el concepto de lo público. 26 27