El Buscador numero 1 | Page 15

En la filosofía occidental nos perdemos al pensar en la individualidad. Es porque todo está desequilibrado. Esto debe conseguirse en la madurez de la sabiduría. Tenéis que convertiros en esa belleza apacible y luego os convertiréis en una personalidad individual. Igual que los frutos maduran, se separan del árbol y se convierten en individuales. Por medio de las semillas de estos frutos, podrán crecer nuevos árboles. De otro modo, si el fruto fuera inmaduro y pensara: “soy individual”, se estropearía. No serviría para nada. No habría madurado. Debéis alcanzar vuestra madurez y luego estaréis asombrados al ver vuestra propia gloria y profundidad. La superficialidad desaparecerá y aquellas cosas más profundas -que son tan sutiles y nos parecen misteriosas- se hacen tan evidentes que resulta muy fácil el completo conocimiento acerca de vuestro Ser. Esto es lo que debéis lograr. Esto es el Espíritu. Es absurdo vivir satisfecho con cosas mundanas, con lo ordinario, porque no habéis nacido para esto. Habéis nacido para algo especial, y ese algo especial es lo que debéis tener. Es vuestro derecho fundamental. ¿Por qué negaros ese derecho fundamental si está disponible para vosotros? ¿Solo porque sois caprichosos, porque tenéis ideas extrañas o algún lío en vuestras cabezas? ¿Por qué no descubrir la grandeza y la gloria? La riqueza está dentro de vosotros. No deberíais rendiros y perderla, sea por lo que fuese. Este es un momento muy importante. Habéis nacido en un tiempo maravilloso. Daos cuenta que vosotros, vosotros mismos sois personalidades especiales.