Lucas es un perro callejero de Bosa Porvenir que frecuenta el parqueadero del barrio, mi papá guarda el carro todas las noches ahí y siempre lo vemos acostado en el tapete que tiene sobre el andén sucio de la calle, Lucas es muy tranquilo, nunca está de mal humor aunque siempre está hambriento y busca algo para comer entre la basura, a pesar de que algunas personas de vez en cuando le dan comida, pero claro, nunca es suficiente, ya que al no tener nada más ni a nadie que cuide de él lo único que puede hacer es comer. Es uno de los muchos perros abandonados y arrojados a las calles que buscan sobrevivir en las oscuras esquinas de esta ciudad. Lucas nos dice todo con su triste mirada, nos cuenta la dura vida que ha tenido, las noches frías que ha llorado por no tener donde cubrirse, la desesperación que ha sentido por no encontrar algo para comer y el rechazo que ha recibido por su aspecto sucio y perdido, a pesar de su triste historia todo aquel que se acerque a él sentirá el amor que brinda con su nariz mojada y las caricias que da con su hocico.
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