Economía Diciembre 2013 | Page 23

“La principal falla de White es un tema recurrente en el mundo de los negocios: el orgullo desmedido”. La primera lección de Breaking es que los negocios de rápido crecimiento surgen en lugares inesperados. White usa sus habilidades como químico para revolucionar de mediocre industria de las metanfetaminas ya que antes de dedicarse a la docencia era investigador. William Thorndike de la Escuela de Negocios de Harvard estudió ocho emprendedores cuyas empresas superaron más de 20 veces el desempeño y las ganancias de las compañías del índice Standard & Poor’r 500 durante su desarrollo empresarial. Hallo que todas fueran fundadas por emprendedores nuevos en sus industrias que aportaron perspectivas frescas dentro de ellas. Clayton Christensen, también de Harvard, argumenta que los grandes emprendedores miran el mundo a través de un ‘lente marginal’. Esto es tan real que Bill Gates un joven que abandonó sus estudios universitarios y trabajó en un área, en ese entonces, ajena de la industria de la computación terminó lanzando Microsoft en la ciudad de White, Al buquerque, antes de mudarse a Seattle. Hay tres cosas que ayudan a nuestro maestro de química a entender que se necesita para desarrollar un negocio floreciente. La primera es una inmensa ambición. No le preocupa el negocio de metanfetaminas, o el negocio del dinero, dice. Se concentra en el ‘negocio del imperio’. La segunda es la obsesión por la calidad del producto. Otros traficantes pueden vender droga de mala calidad argumentando que a los adictos poco les importa lo que consumen. Él produce metanfetaminas de la mejor calidad, tan pura que se torna azul, y prefiere destruir una tanda completa antes que vender un producto de calidad inferior. La tercera son sus sociedades y alianzas. Descubre el talento de Jesse Pinkman, un ex alumno devenido en traficante de drogas, y forja una solida relación laboral con él. También contrata a una serie de bandas locales para la distribución de su producto. Así, él puede concentrarse en lo más importante de su negocio: la cocción y el control de calidad. Breaking Bad es más aguda aún en el tema de las fuerzas destructivas dentro de los negocios. La relación de White con su cocio de desmorona. Esta constantemente en conflicto son sus distribuidores. Y su balance entre vida y Trabajó es pésimo. El hecho de estar en el negocio de las metanfetaminas le da un giro único a estos problemas. Su relación con su socio se destruye cuando deja que una de las amigas de Pinkman muera de una sobredosis y cuando envenena al hijo de otra amiga. Su relación con su mejor distribuidor se debilita cuando descubre el plan de éste para sacarlo de la cadena de abastecimiento aprendiendo de sus habilidades para luego asesinarlo. Su balance vida- trabajo se complica por su renuncia a contarle a su esposa que se a convertido en un traficante de metanfetaminas. LOS PEORES ANEMIGOS: LA MENTIRA Y EL ORGULLO La disolución de las relaciones entre los socios de negocios, gracias a la lucha de egos, de ambiciones y a las paranoias es un problema constante del mundo empresarial. Piensa en la tensión entre Michael Eisner y Michael Ovitz en Disney o en la ruidosa implosión de los Beatles o de muchas otras bandas de pop. Son habituales la relaciones tensas entre las empresas y sus distribuidores. En una encuesta, 80% de los ejecutivos dijieron que les preocupaba la exclusividad, el control y la protección de recursos. En unos de sus libros, Christensen señala que cada vez que asiste a una reunión de graduados de la universidad, se sorprende por la cantidad de sus compañeros cuyo balance vida-trabajo es difícil. “Sus relaciones personales comienzan en deteriorarse, aun cuando sus perspectivas profesionales sean cada vez más promisorias”. White es también un caso típico cuando se engaña a si mismo pensando que todo lo que hace es para el bien de su familia.