los jovenes
El sueño terminó, pero desde aquel momento, Juan Bosco comprendió que su vocación era ayudar a los niños pobres, y también a enseñar el catecismo ya llevar a la iglesia a los niños de su pueblo.
En su trabajo educativo fue ayudado siempre por su madre “mamma” Margarita que había venido de Becchi para apoyarlo.
En 1859 invita a sus primeros colaboradores a unirse a él en la Congregación Salesiana : habrá una rápida multiplicación de oratorios, escuelas profesionales, colegios, centros vocacionales, parroquias, misiones.
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