Br. Domingo Salazar Rojas.
El normal transcurrir de una mañana en la avenida Tulio Febres Cordero de Mérida, artería
plena de vehículos y transeúntes, es dominada por el rostro de Domingo Salazar pintado
a la entrada de la facultad de Medicina de la ULA (Universidad de Los Andes),
homenaje de sus compañeros con el que se conmemora cada 18 de noviembre de 1969
la ominosa muerte de este líder estudiantil inmortalizado hace 49 años en la memoria
colectiva del pueblo.
Domingo Salazar Rojas, estudiante del cuarto semestre de la Facultad de Medicina, presidente
del centro de estudiantes, fue un digno ejemplo de la juventud estudiosa, aguerrida y comprometida que asumió su responsa-
bilidad de líder a la altura de su tiempo, siendo un auténtico representante de la juventud revolucionaria, que habiendo llega-
do desde la población de El Tigre, engroso las filas universitarias la que compartió con su lucha política y su militancia en el
otrora glorioso Movimiento de Izquierda revolucionaria (MIR), siendo unos de sus más esclarecidos dirigentes.
Aquel mes de noviembre del año 1969, a pocos días el estacionamiento de esta facultad, abajo por las canchas de
del allanamiento de la Universidad Central de Venezuela tenis, los que estaban en el edificio de ingeniería se dispersa-
(UCV) realizado el 31 de octubre por más de 3.000 efectivos ron y corrieron por el taller de mantenimiento, otros por la
policiales y militares, las jornadas de protesta se intensifica- facultad de ciencias al borde del barranco, otro grupo agaza-
ron en Mérida. Los días 17 y 18 de noviembre, columnas de pado en un semisótano al lado del cafetín cerca del centro
humo se alzaron al cielo merideño y ráfagas de metralla fue- de estudiante de medicina, el ambiente estaba impregnado
ron disparadas contra la humanidad del movimiento estu- de los gritos de los estudiantes acompañados por los dispa-
diantil que luchaba por una renovación universitaria y mejo- ros de FAL. Los soldados pasaron directamente al sector
ras sociales. donde estaba domingo, siendo derrotada la protesta estu-
diantil con saldo negativo. Cientos estudiantes heridos, dete-
Como represalia del gobierno de turno ante la protes- nidos y el vil y cobarde asesinato del Bachiller Domingo Sala-
ta estudiantil, las autoridades policiales y militares impusie- zar, quien se refugiaba en el baño cerca del centro de estu-
ron un férreo cerco a las facultades de ingeniería y medicina, diantes y al rendirse salió del mismo con su pañuelo blanco a
los estudiantes se defendían como podían del asedio militar, brazo levantado como señal de rendición junto a otros uni-
que no permitía ni la salida ni la entrada de nadie a los recin- versitarios. Estando allí el sargento al mando del pelotón de
tos académicos. Domingo Salazar se encontraba en las cerca- cazadores se acercó para preguntar quién dirigía a los estu-
nías del centro de estudiantes de medicina, las protestas ya diantes, Domingo Salazar salió diciendo, "yo soy el jefe políti-
tenían dos días. Los militares ocasionaban apagones intermi- co del grupo", y "El militar sencilla