lá de
llá
de los
los límites
límites
apuesto, varonil , cachondo...
quiera, con alegrías y tristezas; la cual muchas
veces se ha visto afectada o beneficiada por
su carrera. Es de carne y hueso, no por verlo
como un símbolo sexual debemos olvidar que
es un ser humano con debilidades y fortalezas.
Poco a poco ha aprendido a sobrellevar
las dos facetas de su vida, el espectáculo y la
privacidad, ha logrado equilibrarlas, aunque los
tropiezos en ambas han existido. Muchos lo han
juzgado y otros envidiado, han querido acusarlo
incluso de estar inmerso en la prostitución y en
negocios turbios, pero la verdad siempre ha salido
a flote y nunca ha tenido mayores contratiempos.
Tiene cuatro películas grabadas, otros
proyectos que están a punto de salir y algunos
que están por realizarse. Además
de sus espectáculos en
c e n t r o s
nocturnos,
sus
colaboraciones
e
n
proyectos
distintos
dentro
de
la industria
del entrete-
nimiento
gay y su
trabajo como
e m p r e s a -
rio; tal es el
caso de su casa
p r o d u c t o r a
“Charly Diaz Films” (C.H.D.
Films), donde saca a la luz “Habi-
tación 2507”, cinta que es posible adquirir en
tiendas especializadas o a través de internet.
No fue sencillo crear un concepto que beneficiara a la
comunidad gay, pues en un país como México dónde la mayoría
de la sociedad vive inmerso en un mundo conservador,
desarrollar éste tipo de
empresas es criticado, atacado y menospreciado.
Ser un actor porno no es solo mostrarse
frente a la cámara y tener relaciones sexuales,
es tener una mentalidad abierta a cualquier
situación, se necesita tener no sólo un cuer-
po, sino ser honesto consigo mismo, con sus
sentimientos,
entend-
er que es sólo un trabajo. Ser
un
actor porno no es sencillo, es estar dispuesto a
perder su privacidad con el mundo y a mostrar
hasta el más oculto detalle de su cuerpo y
claro, de su ser, aceptando todo lo que conlleva.
Ser conocido a nivel internacional en una
industria tan complicada, en la cual se juega la
reputación, no es nada fácil y es digno de
presumirse. Es enfrentar a todo un mundo con sus
críticas y sus complejos y salir
adelante
con
la
frente en alto.
Hacer lo que
queremos
con
lib-
ertad y
respeto,
d e b e
ser la
c o n -
stante
e
n
n u e s -
tras vidas.
Además de ser
actor, es bailarín
en el Botas Bar en la
Zona Rosa del Distrito Federal.
Pero más allá de su profesión y su vida pública,
Charly Díaz tiene una vida personal como cual-